El crítico gastronómico desapareció en El Bulli de forma voluntaria

Sin duda. Has hecho una descripcion tipica de un jeta (que tambien conocemos tu y yo)
Un abrazo Gabriel

Lo que tenía arruinado era el estómago. Esto demuestra que hay que comer normal, ni en un extremo ni en otro. A este le ha pasado lo mismo que al de Supersize-me!!, pero con una sobredosis de foie.

Para mí está claro, le ha cogido un achuchón de tanto superplato, o le han enseñado una foto de un niño etíope y está en el psicoanalista.

Hay que tener una madera especial para hacer estas cosas. Néstor Luján lo hacía con unos amigos por toda Francia, con chófer por supuesto, quince días al año; vacaciones gastronómicas por todo lo alto, volviendo con el hígado hecho puré y el estómago dolorido. Por eso os digo que va por ahí.

Aquí en Catalunya decimos; Tal faràs, tal trobaràs. O lo que es lo mismo, éste se lo merece.

Saludos Jordi