Y de vinos del Principado de Asturias que?

Pues mira Cente, hiciste muy bien, porque todos tus buenos recuerdos se habrían truncado si hubieses bebido los vinos de Cangas.
Podría contarte mil anécdotas porque ya te puedes imaginar que, siendo el crítico de vinos del Principado, pues me las he tenido que tragar todas, pero como esto no es espacio para folletines, te lo resumo.
Hubo un sinvergüenza experto en chupar subvenciones que engatusó a unos cuantos cangueses, generalmente prejubilados de la mina, y montó aquél circo con el único fin de coger la pasta y salir de estampida. Así lo hizo y dejó embarcados a cuatro inocentes que pensaron que hacer vino era como fabricar madalenas, y claro, lo que salió eran unas pócimas intragables, y encima a precios de vertigo, porque la orografía y su situación geográfica, hacen que las vendimias y la logística sean otro handicap.
Como será la cosa, que ni siquiera tenían un enólogo que les dirigiese. Y es una pena, porque hay un par de variedades autóctonas, como la Albarín y la Carrasquín, que podrían dar vinos interesantes, pero como plantaron Mencía, pues calcula.
Ahora, como tienen todavía el vino de hace tres años en las bodegas, parece que alguno está tomándose la molestia de estudiar algo, pero como ya se fundieron la pasta en hacer cofradías, fiestas y comedias, pues no sé si dentro unos años quedará alguna en pié.