La dificil compra de manzanillas y finos

El problema es que aquí en Andalucía la gente tampoco consume fino, manzanilla, amonyillado, olorosos, etc, porque para eso ya está la cerveza, y el riojismo si quieres beber vino -esa enfermedad que obliga a beber tinto, porque todo el tinto es rioja salvo los que saben que existe el pago de carraovejas, moda reciente en la costa del sol, a 35 grados celsius-. De manera que si ni aquí hay rotación ni consumo ni interés, ni del consumidor ni de la bodega por llegar mejor al consumidor, pues no en Valencia, no en Madrid, no en Málaga, llegará el día que ni en Jerez, ni en Sanlucar, ni en El Puerto, ni en Montilla, va a ser posible beber nada en condiciones. Si las bodegas hacen descansar el negocio en los blancos de mesa -castillo de san diego, ribera del puerto, y similares del condado-, lo mismo llega el día en que se cansan de tener las naves ocupadas con tantas soleras y criaderas. Quizás ese día sí llegue el producto que ahora buscamos, pero ya a qué precio será.
Yo apuesto también por comprar a la bodega, pero quién se apiada del pobre bebedor solitario en su familia,con lo pequeñas que hacen las casas. Qué sería entonces antes, la cirrosis por no tener que tirar el excedente, el desahucio por no pagar la hipoteca con tanto comprar por cajas.
Un finito, mi reino por un finito