¡Corcho Largo!

4 respuestas
    #1
    anonimo

    ¡Corcho Largo!

    Bueno, Juan, creo que esta es una de esas clásicas preguntas de exámen
    para Juan Ferrer. Cuando estuvo en casa para la calçotada, y abrimos el GAJA,
    me acuerdo que mientras descorchaba la botella, hizo un gesto de preocupación
    y le comentó a Javier Serrano: ¡Corcho largo!.
    La verdad es que el corcho del GAJA es algo más largo que el resto, de los pocos, todo
    hay que decirlo, que yo esta colección la he empezado ahora, de los que tengo. En aquel
    momento se me quedó la pregunta en la boca, la verdad es que todo el mundo estaba muy
    emocionado con el juego de adivinar de que tipo de uva, païs etc se trataba, y no se me ocurrió
    decirle a Juan Ferrer que aclarara su disgusto por aquel corcho...
    Cuando vuelva del Loira espero que nos de una lección sobre corchos, tamaños e implicación
    posible en los resultados en botella.

    #2
    Juan Such
    en respuesta a anonimo

    Re: ¡Diámetro pequeño!

    Ver mensaje de anonimo

    Según el mensaje que nos puso hace unos días Jesús Madrazo, lo más importante no es la longitud del corcho sino su diámetro, que es lo que realmente importa (recuperación elástica): https://www.verema.com/comunidad/foro/mensaje.asp?mensaje=2392&origen=2269

    Por cierto, continuo sin saber cuánto puede costar un corcho de la máxima calidad (comprado en cantidades grandes, claro) ¿Alguien tiene información?

    #3
    JuanFerrer
    en respuesta a anonimo

    Re: ¡Corcho Largo!

    Ver mensaje de anonimo

    Dominic, Ya he vuelto del Loira, pero desgraciadamente no tengo los conocimientos suficientes para dar ninguna lección sobre corchos.
    Dije ¡Corcho largo! En aquel Gaja, porque estaba utilizando un sacacorchos de laminas de calidad estándar, (es el que llevo en el bolsillo siempre, por motivos de peso y tamaño) con las láminas algo cortas, y demasiado anchas, en los corchos largos y flexibles (como el de la botella de Barolo de Gaja ), hay que ser extremadamente cuidadoso en su extracción, pues si giras demasiado rápido al principio (cuando el corcho suele estar adherido a las paredes del cuello de la botella), puedes sacar solo un trozo, y cuando vi que al girar lentamente, solo giraba la parte superior del corcho, me acojoné, puesto que quería sacarlo entero y nuevecito con la finalidad de enriquecer la incipiente colección de corchos de Paco.

    Por cierto ya tengo escogida (tras muchas meditaciones) la botella que llevaré para compartir el próximo día que nos veamos en Reus o en Porrera.
    Recibe un afectuoso saludo y hasta pronto.
    Juan Ferrer Espinosa
    Enopata.

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