La Feria del Queso y la GLORIA

El viernes estuve en la feria del queso, yo siempre voy un día laborable, ya que los festivos son para los madrileños.

Ese día sólo suelen estar algunos muy aficionados, otros despitadillos y sobre todo los politicos, bien protegidos por la policia.

Sentado en una mesa de uno de los muchos bares, de esa MAJESTUOSA y al mismo tiempo HISTORIA E INTRIGANTE plaza Mayor de Trujillo, con unos 22 grados a la sombra, al sol 30 o más, escuchando la jota de El Candil (te suena Mario), que es la más bella de Extremadura, y para mi de las mejores de España, y de la que mantengo y creo, con muchas más que opinamos igual, que debería ser el inmo de Extremadura. En compañia de mi Santa y de mi hijo mayor, con varias tablas de queso, compuesto por 5 pastas blandas diferentes del Casar, 3 de la Serena, 3 duros de la Serena y 3 de Cabra de los Ibores, con mi bota de vino repleta de T de Terrugem (que maravilla), repito que oyendo ese Candil y probando esos vinos y esos quesos, en la inmensa tranquilidad y al mismo tiempo con el ajetreo de las casetas, al fondo, muy al fondo, crei que estaba en el Paraiso.

Es una sensación que creo haber vivido sólo en dos ocasiones.

Bueno, continuando con el queso, que es lo principal y básico de la Feria, para mi la mejor pasta blanda el Gran Casar y de pasta dura, uno de Monterrubio, que no me acuerdo como se llama.

Un saludo a todos y de corazón que os deseo momentos como estos.