Probé hace unos cuantos meses otra botella y realmente no supe que pensar. No encontré el punto del vino o la botella no estaba muy bien.
Abri una segunda que tenia y realmente me impresionó bastante positivamente.
Un vino de color amarillo dorado pálido de toques verdosos. Muy limpido.
En la nariz notas de frutas blancas y cítricas con toques importantes de pan tostado, frutos secos y mantequilla.
En la boca ataque de frutas cítricas pasando con muy buen recorrido, buen cuerpo, llenando la boca y dejando un post gusto de tendecia acida y refrescante. Obviamente invitando a beber más.
Un placer.
Maridamos con una lubina al horno.
No hablaré del precio porque compré en un pack con otros vinos y todos juntos me salieron muy bien de precio. Pero pagar cerca de los 50 euros me parece algo excesivo.

La experiéncia es un grado y los amigos de Cintruenigo lo saben muy bien. Sin duda el mejor Chardonnay del país, un vino madurado a base de añadas, consolidado como ninguno. Vino potente, elegante, con notas muy definidas de la variedad (mantequilla, hongos), con aires de nobleza. Poderoso, con sabor intenso y gran longitud. Impresionante. Eso si, se pasan con el precio, multiplicado con los años.

Conociendo otras añadas de este vino, supongo que le falta botella, no le encontre la tipicidad de otras añadas, la madera de la crianza esta en primer plano y tapa otros aromas, si que es verdad que salen aromas florales y minerales, pero la fruta esta muy escondida.
En boca l acidez es algo citrica y le falta algo de peso, de tods formas dejandolo en copa y teniendo paciencia mejora bastante.
Le seguiremos la pista porque en este vino siempre hay confianza.

Vino elegante, sedoso en boca, quizás demasiada madera y frutalidad escasa (en comparación con la madera). Flores blancas, manzanas, melocotón, peritas de agua, bollería y flores. Da la sensación de tirar años en botella que desde luego harán perder madera pero tb fruta. Caro el vino