Naranja arcilloso bastante turbio y lágrima bien brillante. Inicialmente se sirve en una copa Riedel tipo Champagne Prestige y su nariz muestra una magnitud de maderas viejas, barnices y toques de manteca de cacao; al cambiar de copa y elegir una Riedel Riesling Grand Cru las maderas pasan a segundo plano y surgen los frutos secos con sus cáscaras (nueces y avellanas), sensaciones de cera y miel algo densa, su fondo es algo plano (se espera que se vaya abriendo en días posteriores). En boca tiene una agradable y densa entrada, su recorrido es fino y muy cremoso, sin tener muchos matices pero realmente equilibrado, sabroso, notable acidez bien integrada, finas notas amargas que, sin embargo, sobresalen en mayor medida al final, amielado, frutos secos; todos estas características se muestran bien integradas haciendo que sea un conjunto bien elegante en toda su estructura y textura. Final largo bien cremoso con un postgusto finamente amargoso y sensaciones de frutos secos.

Para esperar unos días y ver cómo la oxigenación le afecta.

Más info en: http://www.elvi.net/2013/02/09/gracia-hermanos-palo-cortado/

de color ambarino oscuro, turbio, lágrimas muy finas. Inicialmente con poca intesidad y sin gran expresión, necesita de unas horas para abrirse y quitarse los muchos años en botella. Asoman aromas de gran madurez (ceras, amielados, frutos secos), sin rastro de la crianza en flor, con tímidos recuerdos de maderas viejas de fondo. En boca es cremoso, suave, con una nota dulzona como de fruta acompotada contrarrestada por finos amargantes. Un caramelito, muy agradable. En pocas cosas se parece a un palo cortado, lo situaría muy cercano a un oloroso, con el alcohol muy bien integrado en el conjunto y una acidez encomiable. Su falta de complejidad viene suplida por la redondez general. Los vinos de Montilla también saben envejecer, y este generoso con más de 40 años a sus espaldas así lo atestigua. Muy rico!!!