Color amarillo con toques dorados y brillantes.
Aromas de buena intensidad donde destacan los frutos blancos maduros y expresivos, cítricos dulces, caramelos, frutos exóticos, toques minerales y de finos tostados, bien la complejidad de la nariz.
En boca es fresco y frutal, el paso de boca con mucho equilibrio y casi aterciopelado, ricos matices frutales y de cítricos dulces y caramelo, buena complejidad, muy agradable y vivaz, el final es largo y con buena persistencia.
Un vino muy rico y sobre todo frutal y atractivo, como suele ser la godello. Mi santa cuando disfrutó la primera copa, se apoderó de la botella al instante.
Visual:Amarillo pajizo
Olfativa:Fruta tropical, golosina, notas herbaceas
Gustativa:Paso medio, goloso y buena acidez, corto retronasal
Amarillo pajizo pálido.
Nariz ligera con fruta blanca, golosa, cítricos y algún ahumado muy ligero con notas minerales.
En boca es serio, con un ataque seco, volumen medio y final ligeramente amargoso con acidez equilibrada.
Dorado pálido brillante.
Nariz de media intensidad, algo cerrada en el inicio, donde destacan más las características del terruño sobre el varietal, algo que dice mucho. Profundo y mineral, nos da notas de flor seca y fruta blanca, trazas especiadas, piel cítrica, anisados y un mínimo toque ahumado. Madera muy bien trabajada.
En boca es limpio y envolvente, graso pero perfectamente vertebrado por una acidez fresca y que le da mucha vida, con un final largo y buena persistencia, dejando sensaciones minerales y de frutos secos amargos, volviendo los lácteos en el posgusto. Vino serio y de terruño, muy bien elaborado.
Si ya el blanco básico (Vel’Uveyra) nos gustó bastante, este elaborado con viñas viejas (85 años) de godello y bajos rendimientos nos ha parecido fantástico, destacando de nuevo en gran trabajo en viña y en bodega, con una madera que suma y que no resta. Francamente interesante.
Parece que cada vez más las bodegas de Ribeira Sacra se animan a elaborar blancos fermentados en barrica consiguiendo vinos muy interesantes.
Ourive viste un color amarillo pajizo claro con ligeros destellos dorados, limpio, brillante y lágrima gruesa.
Una nariz de media intensidad donde predominan las notas de fruta blanca, flores blancas acompañadas de cítricos y ahumados sobre un fondo de piedra mojada.
En boca tiene una entrada potente, paso untuoso, glicérico, manzana madura, buena acidez, final amargo intenso de buen recorrido y recuerdos de fruta madura con alguna nota dulce y mineral.
Muy buen Godello que aún le falta tiempo en botella para perder ciertas aristas.