Nos agenciamos esta garnachita del Montsant alentados por las buenas críticas. Nos gusta el hecho que lo aguanten casi cuatro años embotellado en los calados de la bodega antes de comercializarse tras los 14 meses de crianza. Abrimos la botella y la dejamos oxigenándose por espacio de dos horas y media antes de proceder con su valoración a 17°C (el 14.5% de alcohol nos invitaba a tenerlo abierto un buen rato). Tapón algo corto, muy compacto y tintado apenas 1 mm desde su base.
VISUAL: Impactante color rojo picota de capa muy alta, con el ribete en tonos cardenalicios y rubí. Muy brillante y muy opaco. La lágrima es abundante, fina y transparente (93).
OLFATIVA: Un vino con muchos aromas primarios, fruta fresca por doquier, fresas y frambuesas, con un puntito floral de rosas rojas marcado. Agitamos y asoman herbáceos de tomillo, balsámicos de eucalipto mentolado y especiados de pimienta blanca. De la madera muy poquito, quizás un sutil recuerdo licoroso de duelas envinadas. Según hemos leído, se cumplen los deseos del productor, que no eran más que predominase un carácter primario y frutoso en el vino. Lo ha conseguido totalmente. Su intensidad es media-alta (91).
GUSTATIVA: Rico, buen ataque, con una acidez muy alta y de gran amplitud. Vino fresco, muy mediterráneo, una garnacha en toda regla, con un paso por boca frutoso aportando notas de fruta roja a gogo, fresas, frambuesas y cerezas. En retronasal asoma un toque herbáceo y un puntito floral de rosas rojas. Post-gusto de cuerpo medio, con la fruta como protagonista, en este caso más acompotada (mermelada de fresa). De la barrica apreciamos un leve recuerdo amaderado, muy sutil, a ebanistería fina, muy bien integrado. Nos encanta cómo consigue el enólogo y los productores que los primarios sean los descriptores preponderantes. No es el tipo de vino que me va, soy de los que aman la madera, pero hay que reconocer que es un vino mediterráneo al 100%, muy rico y muy bien hecho. Además, los 45 meses de botella lo han dejado "al querer" ): (91).
La RCP la considero buena. Nos costó 19 euros, pero se trata de un vino sobresaliente.
MARIDAJE: El día que lo abrimos cocinamos un pollo al horno con pimientos y papas chaucha. La segunda ocasión compartió dos tacos de lomo de cerdo al romero en salsa de guayaba dulce. Por último nos lo terminamos con nuestras lentejitas con costilla y aguacate de los viernes. Exquisito en todos y cada uno de los ágapes pero si hay que elegir, destacamos el maridaje con el lomo y su exótica salsa. Perfecta armonía entre frutosidad, apuntes herbáceos y notas cárnicas, todo perfectamente compenetrado, en absoluto equilibrio. Excelente y fresca garnacha del Montsant, sí señor!.
VIDEOCATA: https://www.youtube.com/watch?v=lu8qbiXZNoM
Salud-os!!
Color rubí tirando a apagado, borde casi teja, capa media-alta, lágrima gruesa y glicérica.
En nariz tiene una intensidad media-alta, notas muy evidentes de alcohol, algo duro, especiado, balsámico, eucalipto, vegetales, poca fruta.
En boca tiene una entrada mas o menos densa, buen cuerpo, buena acidez, algo más frutal en boca de lo percibido en nariz, lo noto más áspero de lo esperado, con los taninos no integrados y un final demasiado secante.
Un poco desconcertado con este vino, quizás ha sido esa botella.