Poco más que añadir a los comantarios anteriores: limpio y brillante, bonita lágrima, amarillo con reflejos dorados; nariz con predominio de la moscatel, aromas cítricos y fruta blanca; agradable en boca, muy frutal. Buen acompañante para un foie.

En nariz presenta peras, notas varietales muy nítidas de la moscatel, cítricos, notas cremosas, piña, elegante; el paso de boca es untuoso, cítricos y varietales, gran persistencia, ligero y agradable amargor final. Pese a que les tengo algo de manía a los blancos no dulces de moscatel, como el Sumarroca o el Jarel, este Libalis es el más persistente que he probado, pero a casi 8 € tampoco hay que correr a por él

Cuando lo compré pensé que era un moscatel clásico (vino de licor), sin embargo, no es así. Es un vino blanco típico de color amarillo pálido con tonalidades doradas. Aroma intenso, floral, con recuerdos cítricos muy pronunciados y algún atisbo de panadería/pastelería. En boca es muy fresco, con una agradable acidez y algún recuerdo amargo. Para nada es dulzón. Final largo y persistente.