Huré Freres es un pequeño productor de Ludes que nos encanta por la gran regularidad en sus vinos, desde los básicos hasta sus gamas altas, cuidando mucho la viña y la elaboración. Esta cuvée inaugura una gama especial de parcelarios. Degollado en abril del 15 y con 3 g/l de dosage.

Dorado pálido brillante, burbuja pequeña y escasa. Media intensidad en nariz donde destaca su carácter meramente mineral, con notas florales y de una fruta blanca fresca además de trazas balsámicas y cítricas. En boca es donde marca diferencias por su acidez y verticalidad, un Champagne lleno de precisión y que porta una tremenda carga mineral y de terruño, dejando dichas sensaciones en un final seco y amargoso. Carbónico bien integrado. Buena persistencia.

Un vino que nos confirma el nivelazo de esta casa y que sin duda irá mejorando en botella con el tiempo, pero que tiene una pinta excepcional por la calidad de la viña que procede, un blanc de blancs de gran categoría. Unos 60 euros, no es barato pero lo vale.