Color amarillo pálido con reflejos verdosos. En nariz destacan los aromas típicos de la garnacha, a frutas blancas carnosas, almibaradas, con algunos aromas de fruta tropical y notas cítricas. En boca es un vino con fuerza y buena estructura, denso y untuoso y con una buenísima acidez que equilibra la melosidad de las notas frutales y los catorce grados de alcohol que apenas son perceptibles.

Realicé una visita a la bodega, para ver la ruta dels artistes (te la puedes hacer en media hora) y hacer la cata de vinos (totalmente personalizada y puedes catar el vino que quieras, eso si, sin abusar).

Mi valoración:
Botella con diseño bonito
Color amarillo semi-transparente.
Nariz a fruta fresca estilo tropical mango, papaya...
Sabor de recorrido fácil, acidez leve y no deja regusto. No me acaba de animar. Es como un garnacha joven más que puedes encontrar por mucho menos en el supermercado. Le falta algo, no sé si será la añada... no está muy equilibrado aunque no se le puede pedir mucho a un vino joven.