Ultima botella de este vino que me ha dado buenos y disfrutones momentos en su consumo. El corcho en buen estado, tintado la parte que está en contacto con el vino y con una fina capa de botartratos.
A la vista un color rojo picota de capa alta. Limpio, brillante y con una muy debil precipitación de bitartratos en el fondo de la botella. Ribete granate y con débiles notas teja.
En nariz buenas y abundantes frutas rojas y ligeras negras en sazón. La madera de su crianza permanece en segundo plano. Sigue mandando la fruta. Leves cacaos y notas de mineralidad.
En boca está redondo, aterciopelado, sedoso, con volumen, te llena satisfactoriamente la boca, frutal, equilibrado, con elegancia, con los taninos domados, con una fresca y elegante acidez que invita a beber y que le otorgará 2-3 años más de vida en forma. Muy grato, sedoso, elegante y frutal paso de boca. Es un vino muy largo. Me da una permanencia de 3,15 minutos muy agradables y satisfactorios.
Han transcurrido casi 30 meses desde la última cata colgada de este vino y ¿Qué me he encontrado?.
Vino encerrado en una botella borgoñona que está vestida con una seria y moderna etiqueta en su diseño. Corcho que la cierra correcto, que está tintado en la cara que está en contacto con el vino y con una leve incrustación de bitartratos.
A la vista un color rojo picota de capa alta. Limpio y brillante. Muy buena, densa y lenta lágrima en su desplazamiento por el cáliz de la copa al que tinta muy ligeramente. Ribete granate-rubí y con leves notas teja.
En nariz abundantes frutas rojas y ligeras negras del bosque en sazón. Leves ahumados de su crianza en roble.
En boca le encuentro con viveza, fino, afrutado, equilibrado, elegante y sedoso. Con un volumen medio en boca. Con la madera muy bien integrada y con recuerdos a leves ahumados y vainillas. Con los taninos domados y manteniendo una fresca acidez que invita a beber y que le otorgará 3-4 mas de vida en plena forma. Muy grato y frutal paso de boca. Es un vino muy largo. Me da una permanencia de 3,00 minutos muy frescos y agradables.
No describo la etiqueta y la botella por haberlo realizado anteriormente. Han transcurrido 16 meses desde la última cata que colgué en esta casa y el vino ha mejorado sustancialmente. Su corcho permanece correcto.
A la vista mantiene su capa alta, buena y densa lágrima que se desliza con pereza por la copa tintándola muy levemente. Menisco granatoso en el que empiezan a aparecer notas teja.
En nariz mantiene su importante carga olfativa de frutas negras y rojas. Madera francesa muy integrada.
En boca muy sabroso, elegante, sedoso, aterciopelado, equilibrado, fino y mineral. Un vino con volumen. Te llena plenamente la boca. Taninos domados. Con carga frutal y que te retrotaen a la fase olfativa. Leves cacaos, ahumado de su estancia en madera y muy leves notas de canela y tabaco. Muy grato y sedoso paso de boca. Presente y elegante acidez que le hace mantenerse con vida y te invita a beber. Me da una permanencia en boca de 3,15 minutos muy sabrosos.
A la vista se presenta con un color picota, con una capa alta, y los bordes y destellos de color donde predomina el color violáceo aún, una lágrima ancha y lenta en su caída.
En la nariz se muestra con una intensidad de media a alta, con la fruta presente, los detalles de la madera detrás.
Al paso por la boca, se muestra con una buena acidez, la fruta en buena proporción, con los taninos presentes sin molestar y la madera bastante por detrás. Un puntito goloso.
Un buen vino del Bierzo, con un punto goloso que me desorienta, pero que entiendo que tiene que aun ir a más.
Picota oscuro con ribete morado. Capa alta. Lágrima lenta.
Buena intensidad. Frutos del bosque maduros, tostados, notas lácticas y de flores azules.
Buen ataque. Goloso, suave, fruta negra, madera, algo astrigente, falto de estructura, buena acidez. Buena amplitud. Post-gusto largo algo secante a fruta negra y caja de puros.
Buena mencía a buen precio.
Este es un vino que nos dieron a probar durante la comida organizada por la Academia de Gastronomía de Castilla-León en Astorga, en la que nuestro ilustre veremero Gabriel Argumosa, fué investido como Académico de Númeroy Letra.
El vino se presenta encerrado en una botella borgoñona y vestido con una sencilla etiqueta de diseño moderno en la que predomina el color marrón claro. Correcto corcho.
A la vista le encuentro de un bonito color rojo picota y con notas violáceas, capa media alta, limpio, brillante, buena y densa lágrima, que se desliza por pereza por la copa tintándola.
En nariz abundante frutas negras y rojas del bosque en sazón, cerezas, arándanos, mayuetas, fresas, delicadas notas de su crianza en madera, algo de canela.
En boca está elegante, aterciopelado, sabroso, te llena plenamente la boca, equilibrado, sus casi 15 % de volumen pasan desapercibidos, mineral en forma de tiza de encerado, taninos domándose, retornan las frutas de la fase olfativa, sus cerezas, sus arándanos, sus mayuetas, sus fresas, madera francesa bién integrada. Expléndido paso de boca. Elegante acidez que invita a beber y que le dará algunos años más de vida. Es muy largo. Me da una permanencia en boca de 3,00 minutos.