Cómo hemos de reaccionar.

Mujer, no se trata de pasar por pobre... es que no somos millonarios :-)

Off-topic: Felicidades por el nuevo avatar... Que dure ;-)

Un abrazo para tod@s @->-

La verdad es que con estas ginebras tan ricas hay que tener cuidado en los precios,pasando del gordons,bifiteres y demas,son un peligro los precios;
Pero desde luego lo que te ha pasado es una atraco,en ningún restaurante estrellado te hubiesen cobrado mas o parecido a lo que te cobraron en un simple novotel,bueno en beresategui creo que si se hubiesen pasado hace tres años me cobraron por un habana 7 con cola ,antes de pasarme al gin-tonic,15€,osea que ahora con una citadelle o un g`'wine ni te digo.
Lo dicho no me tomo un gin en un novotel,gracias

En esos casos yo le sonrío al pagarle, le digo algo así como "pelín caro el gin, ¿no, amigo?", no derjo ni un euro de propina y, lo más importante: no vuelvo en mi p... vida.
Saludos
(no pongo "cordiales" porque mi amigo Oti me dice que soy muy antiguo...) ;-)

Yo aprendí de una mujer a la que admiro, que está forrada y regatea hasta por un terrón de azucar, así de claro!!!, y espero que no me lea.
Esta señora, nunca ha comprado ni pagado nada, a lo que no haya puesto ella el precio, a base de preguntar y regatear.
Una mujer muy sensata, a la que creo que todos los que la conocen admiran mucho.

No es que nos duela pagar, es que nos duele tirar el dinero. El dinero es un bien de cambio, no papel higiénico.

No me gusta regatear. Prefiero buscar ofertas en internet ;-) Del resto, totalmente de acuerdo :-)

A mi tampoco me gusta regatear, de hecho durante mi infancia cuando veía a "esta señora hacerlo", me traumtizaba, pasaba mucha vergüenza. Aunque me va a dejar una buena herencia jajajajajajajajajajaja(Creo), hasta "que no està al sac i bén lligat, mai se sap..."

No sé si lo he comentado en el foro, hace muchos años fui con un amigo y mi mujer a La Dorada de Madrid, como conocíamos el de Barcelona teníamos bastante claro lo que queríamos pedir.
Se nos acerca el maître y nos suelta de carretilla, “les voy a traer a los señores un platito de no sequé y un platito de no se cuanto con unos de lo otro (por supuesto todo platos de marisco y caros )” y sin esperar nuestra contestación el tío se da la vuelta y se va.
En estas llega el camarero y le decimos. “dígale usted al Maître que cuando pueda venga un momentito”, cuando volvió el Sr. Maître le dijimos, haga usted el favor de traernos la carta que nosotros ya le diremos lo que queremos comer.
Otra anécdota en el mismo restaurante es que cuando tenías el plato por la mitad, al mínimo despiste pasaba el camarero y se lo llevaba, hasta el punto que a la segunda vez le dijimos que si se volvía a llevar un plato sin nuestro permiso, nos íbamos sin pagar.
En el de Barna ningún problema y lo visitaba a menudo.

Mi mujer en unos grandes almacenes en Tokio y lloviendo pedía descuento para comprar un paraguas, y aquí pide descuento hasta en el Corte Ingles, no se lo hacen pero siempre le regalan algo, jeje