¡Esas guarniciones, por favor!
Re: ¡Esas guarniciones, por favor!
Ver mensaje de PnietoVaya Pnieto, ¡cómo se cuidan los hippies! :)
De bobada nada, es eso precisamente lo que busco, esos detalles originales que no tienen por qué ser difíciles ni caros. No pido caviar como guarnición, solo algo con cariño y respeto al comensal y a lo que piensas cobrarle.
Re: ¡Esas guarniciones, por favor!
Ver mensaje de FrancescfEso, eso!!! Recuerdo que en una ocasión en que me pusieron un buen puré de verduras como guarnición que tenía el tamaño de un garbanzo. ¡Para un vez que la guarnición era buena, escasa!. Pues sí, ha protestar: no sólo devolver el plato por que la carne o el pescado está pasado, sino por que la verdura es congelada o las patatas están negras como el hollín... claro que el camarero me pondrá tal expresión que se me subirán los colores... ;)
Re: ¡Esas guarniciones, por favor!
Ver mensaje de LamorQue ponga la cara que quiera... Nosotros pagamos, ¿no? Pues que espavilen, que la competencia es dura :-)
Menjar per pensar, pensar per menjar.
Re: ¡Esas guarniciones, por favor!
Ver mensaje de LamorYo creo que Lamor ha dado bastante con la clave del asunto. La exigencia del consumidor.
La mayoría de los que aquí escriben tienen un nivel de exigencia muy muy por encima de la media; aprecian detalles que a la mayoría de la gente ni les importa, se fijan en calidades y puntos de cocción, valoran las guarniciones, la vajilla o la cristalería, el tamaño de las mesas, el vino, el hilo musical del restaurante..... Detalles, detalles y calidad. Vamos lo que suele acabar marcando la diferencia entre restaurantes normalillos y buenos establecimientos.
Y por supuesto, existe todo el derecho del mundo del cliente exigente de esperar esos detalles, sobre todo cuando la cuenta así lo demanda.
Pero, miremos la cuestión desde el punto de vista contrario. Y esto es algo que me pregunto en muchas ocasiones. Si un hostelero llena el local casi todas las noches, pero ofrece una calidad normalita, sin cuidar esos detalles de los que antes hablábamos; e incluso dando un servicio pobre ya que el salón de su restaurante está "masificado" y sus camareros ni están suficientemente cualificados ni dan a basto con tanto comensal.... Si como antes decía llena casi todos sus servicios ¿es empresarialmente rentable para él quitar mesas, contratar más y mejor personal o cuidar detalles que probablemente la mayoría de sus clientes no valoren??
Sé que gastronómicamente se le debe pedir más a ese restaurante, pero qué hace un hostelero si esa es la manera más rentable de llevar su negocio???
Y que conste que ese tipo de sitios NO ENTIENDO como pueden tener tanta clientela, ya que a mi, no me valen....
Re: ¡Esas guarniciones, por favor!
Ver mensaje de LamorSeguramente sea por que la guarnición no se escandalla en la mayoría de sitios....
SALUT¡¡¡
Re: ¡Esas guarniciones, por favor!
Ver mensaje de LamorSin duda que tenemos derecho a reivindicar nuestra rareza y al mismo tiempo , estoy seguro que los restauradores profesionales de verdad estaran encantados porque haya gente que valore el esfuerzo que ellos realizan en "esas pequeñas cosas" que para muchos no son perceptibles y que , para otros , son determinantes
Re: ¡Esas guarniciones, por favor!
Ver mensaje de El GastronomoComo bien dices, los foreros no son representativos. Yo mismo he colgado locales que llenan y que no suelo frecuentar, pero entiendo que los empresarios no cambien nada si el negocio les va bien.
Quien paga, manda. Y la mayoría prefiere cantidad a calidad, sangría a riesling, jarra de medio litro a copas Riedel, la canción del verano a todo trapo al chill-out,... Mientras nos dejen un reducto para los "raros"... :-)
Menjar per pensar, pensar per menjar.
Re: ¡Esas guarniciones, por favor!
Ver mensaje de LamorBueno, ahora he visto muchas verduras miniatura, muy hermosas y curiosas, o una ramita de romero que da un olor maravilloso. Recuerdo en un restaurante frances de mi ciudad que la guarnicion era todo un evento, que se pedia y cobraba aparte y llegaba el mesero a servirlo con todo cuidado, y la verdad, exquisito.