Ley Antitabaco. 7 años después.

145 respuestas
    #97
    Gastiola

    Re: Ley Antitabaco. 7 años después.

    Lo primero pedir perdón, en voz alta. Soy fumador. Desde relativamente bien joven. Ahora no me siento capaz de dejar lo que nadie tiene que explicarme que es un puro vicio y adicción. Nadie, repito, nadie me cortó las manos cuando empecé. También quisiera pedir perdón por las molestias que causo a los demás viandantes cuando salgo de un local a fumar. Con lo limpio que suele estar el aire de una gran ciudad. Lo de los coches lo obviamos, por dios. Eso no molesta a nadie. Ni siquiera al "saludable" no fumador que se ha acercado hasta el restaurante en su flamante todo-terreno o incluso si es menester en un vuelo "ecologista".
    Tengo clarísimo que los culpables de la salud pulmonar del resto de la población somos nosotros, los monstruos, los que aún hoy somos capaces de seguir fumando. Ni se me ocurre pensar en que quizás las industrias petroleras, o las químicas o los aviones o los coches o las nucleares o los conservantes o lo tanques y misiles tengan nada que ver con lo que sucede.
    De todos modos quizás el asunto se nos ha ido un poco de las manos y estemos hablando ya de algo que no aporta demasiado en una página como esta.
    Repito, tengo clarísimo que lo que hago ni es saludable ni es solidario y que soy incapaz de dejarlo. No estoy defendiendo a los fumadores pero no seamos hipócritas que aquí todo lo pagamos a escote y que no deje de ser así. Creo que a eso se le llama solidaridad y yo lo soy con otros enfermos que quizás tampoco han elegido que les suceda lo que les sucede. Por cierto, nada peor, ni con mucho, que un ex-fumador. Esos sí que son "radicales". Pero todos sabemos el motivo. Incluso ellos. Un saludo comunitario. Prepara los oídos. :-)

    Rafa72

    Re: Ley Antitabaco. 7 años después.

    Hola Aurelio, aunque por lo leído en este foro veo que estoy en franca minoría y para no ser hipócrita te diré que como fumador que soy la dichosa ley me sigue pareciendo igual de mal que cuando comenzó a aplicarse en su momento. Hubo un tiempo, ya lejano, en que se había llegado a una solución paritaria en la que ni fumadores ni no fumadores salían perdiendo y todos ganaban. Me refiero a cuando en los locales de más de 100 metros cuadrados (creo recordar que decía la ley) el dueño del local debía separar y habilitar zonas para fumadores y no fumadores, con el consiguiente gasto económico que ello supuso, gasto por otra parte que cayó rápidamente en saco roto a los pocos años cuando el gobierno, de forma unilateral y autoritaria, decide un buen día que ya no se puede fumar en ningún local público cerrado, alumbrando así una ley antitabaco que en aquellos tiempos se erigió en una de las más duras de toda Europa, superando en dureza, esto es, en restricciones, a las que tenían otros países europeos vecinos nuestros, ¿ ya nadie se recuerda?.
    Fumar en bares y restaurantes pasó de la noche a la mañana de ser un hábito (si un hábito más que un vicio, mal que les pese a algunos) tradicional y socialmente aceptado a perseguirse casi como un delito penal, con la consiguiente demonización de los fumadores que pasamos a ser algo así como los apestados de la sociedad, los nuevos "yonquis" del S. XXI y gente "peligrosa" y "viciosa", cuando no "enferma" a los que los nuevos "inquisidores" deben perseguir para castigar, curar y reeducar. ¿Dónde quedan los derechos del fumador? en un "sálgase usted a la calle" aunque estemos en pleno enero a 10 grados bajo cero a consumir su "droga". Lamentable. Y a eso muchos le llaman tolerancia. Ole.
    En cuanto a si la dichosa ley hizo daño a la hostelería os puedo decir que los primeros años supuso una auténtica debacle que hizo cerrar muchos bares. Está comprobado que la mitad de la gente que va a los bares (que hay que recordar que no es ni mucho menos la totalidad de la población) fuma y esa gente asocia (asociamos) el consumo de determinados productos con el cigarrillo, porque digan lo que digan el cafelito sin el cigarrillo no es lo mismo. Pues bien, mucha de este gente al principio dejó de salir a bares y restaurantes y optó por la única solución que les dejaron: tomarse el café en casa y así poder fumarse su cigarrito de costumbre. Con el paso del tiempo no tuvimos más remedio que sacar la bandera blanca de la rendición ante las poderosas tropas enemigas cada vez más numerosas, fuertes y con más recursos. Desde aquí quiero expresar mi más profunda admiración hacia esos pocos hosteleros-héroes que optaron por la insumisión hacia una ley injusta que les condenaba al cierre de sus negocios. Lamentablemente se quedaron solos en esa lucha (si todo el sector de la hostelería se hubiera puesto en pie de guerra otro gallo nos cantaría ahora) y no tuvieron más remedio que rendirse hartos de cuantiosas multas administrativas y decepcionados ante la pasividad de la sociedad en general (sobre todo de los propios fumadores por los que se jugaron el negocio).
    Por lo que he podido leer, este tema siempre levanta las pasiones más desatadas y en el fondo divide a la población entre dos sectores que parecen irreconciliables: los no fumadores, que evidentemente están a favor de la ley y quieren que se profundice todavía más en las restricciones (en este grupo incluyo también a los ex fumadores, pues como todos los conversos se convierten en los más entusiastas y beligerantes de la nueva causa); y por otro lado estamos los pobres fumadores, cada vez con menos derechos, sin ninguna capacidad de decidir nada al respecto y que además debemos llevar nuestra afición al tabaco en silencio, con resignación y vergüenza para no caer en el descrédito público.
    Supongo que mi opinión generará algunas ampollas en el sector más belicista anti-tabaco, no busco la polémica ni encender nuevos debates sólo he tratado de expresar lo que sentimos muchos fumadores tras muchos años de prohibiones, persecuciones y acoso. Ahora cuando veo una película española de hace 20-30 años y sale una escena de aquellas maravillosas sobremesas en los restaurantes donde se debatía de lo divino y lo humano con la compañía de un brandy, un whisky o un gin-tonic y el maravilloso aroma de un buen habano me parece que aquel país ya no es el mío y son imágenes que nos retrotraen a un mundo que por desgracia ya nunca volverá. Un saludo.

    Lovecft
    en respuesta a Abreunvinito

    Re: Ley Antitabaco. 7 años después.

    Ver mensaje de Abreunvinito

    El tabaco es la droga que más adicción crea, por encima de la heroina, y la que menos placer da, fíjate que absurdo, por que es el que menos altera los sentidos. Un fumador, más allá de que te pueda echar el humo en la cara, no supone una gran molestia, un alcohólico darte la brasa hasta que te den ganas de partirle la cara...o peor aún, puede subirse a un coche y llevarse a alguien por delante. Un heroinómano, ... como vaya con el mono tienes todas las papeletas de que te saque una navaja... En definitiva, ninguno de ellos está en condiciones de llevar lo que podríamos decir, una vida normal.

    Un fumador, si, fuma, pero por lo demás ni se ven mermadas sus condiciones para coger un coche, ni te va a sacar una pipa para comprar tabaco.

    No podemos equiparar todas las drogas porque no todas actúan igual en nuestro cuerpo y por ende no nos llevan a comportarnos de igual manera en sociedad.

    No está muerto aquello que yace eternamente. Y con el paso de los eones, hasta la muerte puede morir

    Lovecft
    en respuesta a Rafa72

    Re: Ley Antitabaco. 7 años después.

    Ver mensaje de Rafa72

    Por alusiones como ex-fumador... Jamás me pondré de lado de las hordas enemigas :P, sobre todo cuando se intenta llevar al extremo, que ya conozco gente a la que le molesta que se fume en la puerta del bar, que tiene cojones. Pero si que es cierto que a mi, ni cuando fumaba, me gustaba tragarme el humo del de al lado mientras estaba comiendo, asi que en principio la ley a mi me pareció bien en su día. Lo que me sigue sacando de quicio, y de alguna manera por eso siempre me sentiré fumador, es el trato denigrante que se le ha dado al fumador en los últimos años.

    No está muerto aquello que yace eternamente. Y con el paso de los eones, hasta la muerte puede morir

    Rafa72
    en respuesta a Lovecft

    Re: Ley Antitabaco. 7 años después.

    Ver mensaje de Lovecft

    Hola "Lovecft" me alegra ver que existen ex fumadores que no se han pasado al bando radical antitabaco, hasta ahora no conocía ninguno. Te diré que estoy completamente de acuerdo contigo. Yo soy fumador, aunque moderado (medio paquete al día para que te hagas una idea) y a mi también me molestaba cuando en un restaurante daba con un fumador maleducado (que también los hay, por supuesto) y me tiraba todo el humo mientras yo trataba de saborear mi plato. Yo eso nunca lo he hecho, entre otras cosas porque en los restaurantes sólo fumaba con el café, es decir después de los postres y haber terminado totalmente la comida/cena, nunca me gustó fumar entre plato y plato, creo que te ensucia el paladar con lo que te impide disfrutar mejor la comida y además te quita el hambre. Respecto al trato denigrante que se le da al fumador veo que me entiendes porque seguramente en alguna ocasión lo habrás sufrido en primera persona. Un saludo.

    Espeluznao
    en respuesta a Abreunvinito

    Re: Ley Antitabaco. 7 años después.

    Ver mensaje de Abreunvinito

    Como curiosidad estos días se ha dictado en EEUU una de las sentencias más duras contra una tabaquera (Reynolds) por provocar cáncer en un fumador. La sentencia ha sido un disparate.. creo que obligan a la tabaquera a pagar 17.000 millones de euros a esa persona. Es cierto que quizás no se advirtiera de todos los riesgos, pero hace ya mucho años que se sabe que el tabaco no es bueno, y creo que alguien que fume mucho lo tiene que notar en su día a día (descenso de la capacidad pulmonar etc).

    Es como si uno se hincha a hamburguesas y luego denuncia a Burger King o McDonald's por todos los problemas de salud que trae consumir mucha comida basura, con altos niveles de grasas, colesterol y calorías.

Relacionados
  • Más leído
  • Más recomendado

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar