Pues sí, fue un programa bastante basura: los pijos catalanes, la continua

Pues sí, fue un programa bastante basura: los pijos catalanes, la continua autopropaganda, el supercutre nivel culinario de los concursantes (en general)...Supongo que les irán haciendo clases, pero tal como dice Carlaangr alguno de ellos no sabía ni cortar la cebolla...Y lo peor de todo, el llorica valenciano, qué asco, todo un campeón de artes marciales llorando tres veces por programa y además con su ridículo discursito defendiendo a los que se habían reído de él. Me recuerda un poco a aquel informático valenciano de una edición anterior (sí, ya sé, alguno me dirá que el ser campeón de repartir leches no está reñido con ser muy sensible, pero hombre, ni tanto ni tan calvo).
Saludos,

Carlos