¿Cómo entrasteis al mundo del vino? Experiencias personales de acceso a este mundo

La idea del hilo es que comentemos cómo comenzamos a interesarnos por el vino, porqué, a través de quién o qué vinos y cómo accedimos a esos vinos, etc. pues para saber cómo lograr captar a más consumidores jóvenes, es necesario conocer antes cuales son los caminos por los que los aficionados llegamos a ser aficionados. No hay un modo mejor o peor, no hay un solo camino... cada uno nos iniciamos de una manera diferente... pero, ¿se conoce cuáles son las más habituales y si hay rasgos comunes en todos los procesos de "aficionamiento"?...

Responder a estas preguntas es fundamental para poder diseñar una mejor estrategia y, que yo sepa, aún no hay estudios cualitativos científicos sobre esta cuestión...

Así, daré comienzo yo mismo al hilo con mi historia más o menos resumida:

A los 17 años, cuando comencé a beber alcohol (antes nunca lo había hecho, y lo que más cerca estuve del vino era de los Albali que se bebía mi abuelo en vaso chato algún Domingo) nunca pensé en el vino. De hecho, decía que no me gustaba... y lo cierto es que no me gustaba. No lograba sacarle ningún aroma interesante a esos vinos que se ponían de vez en cuando en la mesa de mi casa (baratillos, calientes y en vasos, ojo!)
Así que a mi me iba la cerveza por ser más barata y refrescante y directa que el vino. Cierto es que a veces bebía calimocho (en Asturias es bastante habitual) hasta que una vez lo pasé fatal y lo dejé para siempre. A partir de ahí comencé a aficionarme a la cerveza de calidad: dobles fermentaciones, trigo, abadía, negras, etc. Incluso viajé a Praha donde conocí muchas y muy buenas cervezas... Nunca en todo ese tiempo tuve ningún interés por el vino.

Poco a poco me fui, asimismo, aficionando a la gastronomía de calidad. Un dato importante.

Más adelante, en África (quién lo diría!), me encontré con un gran aficionado portugués, que me dijo unas palabras muy sabias: "si te gusta el buen comer... no tienes escapatoria. El vino llegará a ti y nunca jamás lo dejarás"
Y en este punto hay que detenerse un poco: Por aquél entonces yo consideraba al mundo del vino como un reducto de snobs (algo así como una especie de submundo de pedantillos no muy preocupados por el prójimo, muy cerrado y casi aristocrático)... lo cual condicionaba enormemente mi acceso a dicho mundo. ¿Porqué tenía yo esa imagen?, ¿la tiene más gente joven antes de aficionarse?, ¿quién o quiénes pueden ser los causantes de generar esa imagen aún sin querer? (sería importante saber algo más sobre esto)...

Tras encontrarme con ese portugués, que además de lograr desmontar esa nefasta concepción que tenía yo, me metió el gusanillo y comenzó a guiarme, explicándome cosillas muy sencillas pero que yo no conocía y catar un par de vinos sencillos pero interesantes; me encontré ya de vuelta a España con otro gran aficionado, que en una buena cena pidió un Aalto (lo recuerdo perfectamente) que tomó con un Foi Micuit... y me dio a probar. El vino había llegado entonces a mi vida para no abandonarla más (por lo menos hasta ahora)...

Así que aquí hay otro punto para detenerse: en mi experiencia no comencé a acceder al mundo del vino hasta que, A) alguien me guió, B) alguien me explicó de qué iba la cosa, C) alguien me dio a probar buen vino con la comida. Lo cual quiere decir que yo accedí a través de la FORMACIÓN y la CALIDAD. ¿alguien más accedió a través de estos dos parámetros, cuánta gente, es común acceder a través de estos parámetros?, ¿son tan importantes estos parámetros para el aficionamiento o responden a una experiencia personal "única" como la mía?, etc.

Sin conocer las respuestas a estas y otras preguntas es imposible dirigir esfuerzos para lograr captar a más consumidores. Quizás habría que plantearse la posibilidad de hacer un gran estudio cualitativo sociológico (que no mercadológico) al respecto... ¿quién lo pagaría?, yo estaría encantado de dirigirlo... pero es un trabajo muy amplio que no se puede desarrollar "en los tiempos libres".

Salud! y a ver si entre todos de repente descubrimos puntos en común...