Artadi o la máxima expresión del tempranillo

Ayer nos reunimos unos cuantos socios de la UEC para catar una serie de vinos de Artadi con su alma mater, Juan Carlos López de Lacalle. Hombre reflexivo, amante de la viña, conocedor de su tierra, conocedor de los vinos nacionales y del mundo, Juan Carlos ha sido y es un personaje clave para la historia moderna de La Rioja vinícola. Hablamos con él de lo humano y de lo divino, de los vinos y las viñas, de la tierra y de los hombres que la trabajan y sobre todo dejamos finalmente que fueran sus vinos los que hablaran.

Y hablaron, vaya que si hablaron:

Viñas del Gaín 1998: maduro, equilibrado, elegante, sorprendente a sus 11 añitos.
Viñas del Gaín 2001: en un momento excepcional y con vida por delante. Gran vino.
Viñas del Gaín 2006: una añada difícil perfectamente solventada. Todavía joven

Pagos Viejos 1995: espectacular vino. Elegante, distinguido, largo, sedoso. Una maravilla.
Pagos Viejos 2003: dentro de las tremendas dificultades de la añada, prueba superada
Pagos Viejos 2005: joven, primario, cerrado, pero con una materia excepcional. Necesita tiempo.

Viña el Pisón 1995: grandioso. Un vino al la altura de los mejores tintos mundiales.
Viña el Pisón 1998: preciosa fruta. Atlántico, fino, mineral, sedoso, una caricia frutal.
Viña el Pisón 2004: Muy joven, pero con una definición frutal que casi logra la perfección.

Habitualmente las catas en la UEC duran unas dos horas. Ayer nos fuimos por encima de las 3. Siempre he expresado mi admiración por los grandes clásicos de Rioja, pero hay que reconocer lo justo. Artadi y Juan Carlos son igualmente grandes, se encuentran en la cumbre de los vinos tintos nacionales y no desmerecen para nada de los más importantes nombres mundiales.

Una cata para recordar, ya pondremos un artículo más extenso en el blog. Y ese Pisón 95…a la galería de vinos inolvidables.