Peña el Sarmiento: 2ª Cata 2006

La segunda cata de 2006 de la peña El Sarmiento fue en toda su extensión algo más que una cata. Terminó, como terminan últimamente, siendo una reunión de amigos a la sombra del dios Baco y por desgracia en el caso de ayer, también de Cronos. ¡Malditos Jueves!

La cata programada ayer tuvo lugar en el espacio gastronómico de Lavinia y estaba dedicada a la Borgoña blanca. Fueron seis vinos en cata ciega, con la condición de que uno de ellos sería un gazapo, un blanco no de Borgoña. Nuestro buen amigo Nacho de preparó la selección a conciencia y como veremos posteriormente fue bastante acertada.

He comprobado que Iñaki se ha adelantado en las notas, por lo que yo simplemente voy a enumerar los vinos en el orden que los catamos y con un pequeño comentario personal, adjuntando el enlace que nos lleva a dichas notas.

Chablis Laurent Tribut Cote de Lèchet 1er Cru 2003
El más fácil de acertar, la mayoría pensamos en un Chablis, aunque surgió la duda de un Chardonnay navarro o del Somontano. Vino interesante.
https://www.verema.com/comunidad/vinoscatados/vino.asp?vino=13566

Domaine de Chassarney ";Cambe Bazin"; Saint Romain 2002
Nariz diferente, con buena estructura en boca. Pensamos en un Mersault o un vino del Maconnais. Con personalidad.
https://www.verema.com/comunidad/vinoscatados/vino.asp?vino=13567

Lapena 2002. Ribeira Sacra.
El gazapo. Lo peor es que casi nadie lo acertó plenamente, nos decantamos más por el quinto o por el primero. Un godello interesante, quizá le falte un poco de botella porque la madera se notaba un pelín más de lo deseable.

Domaine Valette Pouilly Fusse 2000
Sus aromas eran muy borgoñones, pero la falta de acidez nos hizo dudar. Buen vino de uno de los grandes del Maconnais.
https://www.verema.com/comunidad/vinoscatados/vino.asp?vino=13568

Domaine Henri Gouges 1er Cru La Perriere Nuits St Georges 2001
Diferente. Un servidor pensaba que era el gazapo desde el principio. Muy bueno, aunque le falta mucha botella, los vinos de Gouges necesitan muchos años para expresarse.
https://www.verema.com/comunidad/vinoscatados/vino.asp?vino=13569

Domaine Leflaive Puligny-Montrachet 1erCru Clavoillon 2000
Desde un principio, el comentario general fue “un Borgoña de libro”. En efecto, al destaparlo pudimos comprobar que era “la estrella” de la cata. Uno de los grandes.
https://www.verema.com/comunidad/vinoscatados/vino.asp?vino=13570

Una vez finalizada la cata, alguien pronunció las palabras mágicas “¿Tomamos algo?”. Nos dividimos, la mitad se fueron a casa y la otra mitad nos fuimos al cercano restaurante “El Fogón de Trifón”. Tomamos un “As Sortes 2004”, nueva estrella gallega que teníamos ganas de probar, acompañado por unos chipirones, unas croquetas de morcilla y unas habitas con chopitos.

El vino nos gustó, es muy fino y elegante, bien hecho y con futuro. Quizá le falta algo de personalidad, el problema es que antes habíamos catado una serie de blancos sobrados de eso precisamente, mucha personalidad. Las tapas muy buenas las tres, pero insuficientes para éstas fieras…

En ese momento me acordé que uno de nuestros compañeros suele pedir los jueves un “catering” del Restaurante Kabuki –el mejor japonés de la capital- para cenar en su casa. Sugerí pedir entre todos un variado de comida japonesa y nos fuimos al piso que otro compañero de la peña tiene en una cercana calle con el añadido de que dispone de una cava con una impresionante selección de vinos que colecciona desde hace ya mucho tiempo.

Para acompañar a las magníficas viandas del sol naciente (tartar e hijada de atún, pez mantequilla, salmón, makis, buey, etc) abrimos dos vinos. El primero una sorpresita, un Albariño Lusco del 2000, con ya seis años y en un estado impresionante. Con un color ya evolucionado, que denotaba el paso del tiempo, pero con una expresividad en nariz y en boca fuera de lo común. No teníamos dudas de que los buenos Albariños evolucionan muy bien, pero éste superó las expectativas. Esta es una botella guardada para ser catada por todo el grupo, por eso lo sentimos por los ausentes anoche. El segundo vino fue un Riesling Kabinett 1998 de Vwe. Doctor Tanisch, el acompañante ideal de éste tipo de comidas. Suave, aromático, profundo, magnífico. Estos vinos, desde sus cuvees más básicas están fuera de concurso.

Una vez terminada la cena, pensamos en tomar un vino dulce, pero viendo lo que tenía en casa nuestro anfitrión, le convencimos – y el no se negó – de tomar un tinto de la Borgoña (no necesariamente el Clos de Vougeot Drouhin de 98). Nos abrió un Saint Romain 1er Cru 2002 del Domaine de Chassarnay. Absolutamente impresionante, una bomba de especias (clavo, curry), tierra, humo, desde el primer momento, nada más abrirlo. En boca una bomba, suave, redondo, con una acidez perfecta. ¡Qué gran colofón a la noche! No quiero decir la hora que era ya, el dios Cronos le acabó diciendo al dios Baco que su reino había finalizado, por lo menos hasta el dia siguiente….