Contiempo, vinos blancos para la reflexión

Muchas veces el nombre impuesto a un vino, aparte de las cuestiones de marketing, debe obligar a una reflexión porque no es cuestión baladí. Cuando Torres llama a su riesling Waltraud, nombre de su esposa; o cuando la bodega Luis Cañas denomina Amaren a uno de sus vinos de alta esencia, en recuerdo a su madre, porque eso viene a significar Amaren en euzkara si no tengo mal entendido,... hemos de ver tras esos ejemplos un cariño especial por ese vino, por ese producto, por parte del bodeguero productor. Traslado esto a Contiempo, expresión de vinos blancos y tintos elaborados por la bodega Arca de Vitis (Güímar, Tenerife), expresión del proyecto de Rodrigo y Jorge hecho una realidad, de un resultado consolidado. La riqueza frutal en boca y en nariz de los Contiempo seco y semi seco blancos no pueden dejar indiferentes a quienes hemos tenido la satisfacción de sentirlos, ni pueden ser desconocidos por más tiempo.
En su proyecto quisieron que Contiempo fuera el resultado de un trabajo serio. Este proyecto no es un experimento, hoy es un magnífico resultado. Me siento orgulloso
Santiago Yanes