Lo del ";mal gusto"; de Parker no te imaginas las veces que se lo he oído a Don

Lo del ";mal gusto"; de Parker no te imaginas las veces que se lo he oído a Don Geraldo (el volumen y el nivel de apasionamiento dependen de la cantidad de botellas que hayan caído en uno de esos ";jeebus’ que él alega ";no conocer,"; pero a los que asiste con frecuencia). Y tiene toda la razón. Claro, para un tipo que vende muebles y artículos de decoración (ese soy yo) es esencial desarrollar un instinto que reprima el deseo de tildar al prójimo de hortera (";picúo,"; en cubano, que es lo que hablo yo; traducido para beneficio del mercado ibérico).

En ese aspecto, Gerry coincide perfectamente con las palabras de Marc Sibard que reporto yo en mi mensaje sobre ";Un artículo interesante.."; Se ha impuesto en el mundo del vino una tendencia a producir vinos que impresionen paladares sin verdadero hábito de vinos. Más parecen ciertos vinos un híbrido maldito entre Coca-Cola, un batido de chocolate, mermelada industrial de frutas rojas y whisky, que vino. Si la perspectiva de las ";autoridades"; sólo es capaz de apreciar lo primero, lo segundo corre el riesgo de perder ";market value.";

Si estuviéramos hablando de carros, para alguien del gusto de Mr. Parker sólo valdrían mamuts todo-terreno como el Lincoln Navigator o el Hummer. Un Mercedes 190 del 56, o, si opta uno por algo más actual, un Mini del 2003, son ";muy poquita cosa’ en esa escala de valores.

Vamos, que por como dominan cada día más el mercado los vinos hipertróficos, a veces me molesto cuando alguien me viene con lo de ";¡Viva la diversidad!"; En un mundo enológico donde la homogenización anda rampante, el concepto de ";diversidad"; coquetea peligrosamente con la memez absoluta y con el anacronismo...

M.