Hola Interesante aportación. Y sí, en general estoy bastante de acuerdo.

Hola

Interesante aportación. Y sí, en general estoy bastante de acuerdo. Alguna apreciación, porque haya debate.

Lo primero comentat tu frase " Antes se preferían vinos con más crianza y extracción ". ¿Qué entiendes por antes?

Voy a comenzar con una comparativa, pero que nadie piense que voy a hablar de política.

En España, después de una dictadura de casi 40 años de marcado acento derechista, cuando llegó la democracia parece que la gente giró hacia una mayoría de izquierdas. En muchos páises del bloque soviético, después de dictaduras socialistas, pasó lo contrario (Polonia es el más claro). Al revés, en España se pasó a una menor importancia de la religión, después de décadas de catolicismo más o menos impuesto. Lo contrario pasó en los países del este, cuasiateos por definición estatal y ahora bastante devotos.

¿Qué quiero decir con esta chorrada? Pues que depende de dónde vengas. Yo me inicié al vino, como muchos de mi generación (40-50) bebiendo vino con sus padres que bebían, vinos más o menos ligeros. Los Riojas más o menos clásicos de los 80-90 y todos esos vinos más asequibles (Valdepeñas, La Mancha, etc) que pretendían imitar lo que se hacía en Rioja.

Qué sucede, que cuando empiezas a probar otras cosas: Jumilla, Somontano (de los 90), tintos modernos como Pago de Carraovejas o Pago Florentino y cosas así, pues alucinas. No te esperas esa fruta, esa madera marcada (una madera distinta a la de esos Riojas). Bebedores más jóvenes, supongo, se habrán iniciado con esos riberas roble, con roble muy marcadito y fruta casi mermelada y puede que al probar vinos más frescos, puedan alucinar. Esto último, obviamente, es una suposición.

En mi caso particular, tuve la suerte o la desgracia de comenzar pronto en mi andadura vinícola a probar vinos de Borgoña, Riojas viejos ( eran otros tiempos y otros precios), Jura, Loira, etc. y me gustaron mucho más, porque, además, son vinos más para comer, sobre todo las comidas usuales, más ligeras e influidas por mucha fusión. Luego llegó esta nueva ola, que todos conocemos.

Otro tema es el de los blancos. Casi todo el mundo poco aficionado pero bebedor de vino está acostumbrado a beber vinos blancos insulsos y por eso tira más por el tinto. Claro, mucha gente se convierte cuando prueba vinos blancos serios.

Por concluir, aunque no es realmente una conclusión, una cosa que he dicho ya bastantes veces por aquí y por otros lados es que yo pienso que lo "normal", son los vinos ligeros y poco extraídos. La madera es cara y más si es nueva, tener rendimientos bajos para poder extraer mucho, es caro y excepto en regiones clásicas de mucha maduración, los vinos pienso que tendían a ser bastante más frescos. La ola de los 90 y 00 de vinos extraídos y con mucho roble, creo que ha sido pasajera y aunque seguramente lo actual es mucho de modas y cambios de tendencia, los vinos de ahora son más clásicos que nunca.

Y ya termino, hay una frase que dice que empieces donde empieces, siempre acabas en Borgoña. Puede ser, aunque ahora es más complicado por los precios, pero refleja un poco la tendencia que tiene casi todo aficionado que tiene interés en probar cosas nuevas. Sin quitar que unas veces apetezcan vinos de otra clase.