A la nevera
Durante el año tengo cierto reparo en conservar el vino en la nevera de un día para otro. E incluso en meter el vino en la nevera una o dos horas antes para bajarle unos grados. Prefiero beberlo un poquito más caliente pero sin "meneallo" mucho.
Pero llegadas estas temperaturas no encuentro otra opción. Ayer abrí uno para la cena que debía estar a unos 19-20 grados (salido del sótano) y que rápidamente subió a los 23-24 de la temperatura en casa. Demasiado "caldo".
Tras pasar la noche en la nevera hoy me he puesto una copa hace una hora y debe estar a unos 16-17 (es un Toro potente y le viene bien estar medianamente fresco). Muchíiiisimo mejor que ayer!
Estoy pensando si lo de la nevera no son más que prejuicios y si no debería hacer esto todo el año...