Muy buenas, Israel,                 No me acuerdo si hay un

                 Muy buenas, Israel,

                No me acuerdo si hay un modo de empleo. Basta con inclinar la botella lo más posible. Después, clavo la aguja hueca paulatinamente en un movimiento rotatorio hasta que haya atravesado íntegramente el tapón de corcho. Coloco la botella de pie y empiezo a presionar el pistón, sin darme prisa, a la manera de los Suizos. Es una ley de de física básica : el aire pulsado expulsa el tapón empapado en vino y, a veces, hay un ruido que se asemeja al de un tapón de champán saltando por las aires. Este sacacorchos de aire comprimido no conviene cuando el tapón está medio seco porque arriesgas a estropear la aguja. Me sirve únimamente para destapar botellas tan viejas como Matusalén y el tapón sale intacto. Este método supera con creces el degüelle con tenazas calientes. Los Suizos son eficaces pero tan lentos como caracoles.

              Por cierto, no sé si conoces el siguiente chiste : dos Suizos están caminando en un glaciar de Mont Blanc y, de repente, uno de ellos se cayó en una terrible grieta. El otro desenreda su cuerda - tarda un rato - y la lanza a su compatriota. Oye una voz lejana : - Atteeeends un peuuuu, j'suis pas ennncooore arriiivééé dans l'fooond d'laaaa creuuuuvaaaaaasse !

             No sé quién toma el relevo de Jesús Madrazo que deja Bodegas del Contino, la obra de su vida pero tanto el gran reserva como el simple reserva, sin olvidar el 100% graciano ni el Viña del Olivo, el favorito del ex rey Juan Carlos I - son vinazos que envejecen de maravillas. Este enólogo superdotado me osequió con una botella de su Selección Jesús Madrazo, una botella más preciosa que el oro que conservo religiosamente. Los Suizos prefieren el oro al vino pero beben sus vinos, bien escondidos, sólos, sin invitar a nadie : en Francia, todo conoce la expresión : " boire en Suisse."

               Tout de bon, alles Gute, il meglio per te ! / Alain