Re: La bodega del príncipe Felipe
Ver mensaje de LimoneroHay que distinguir entre los vinos que se compra con su dinero y lo vinos que se compra (y bebe) con el presupuesto de los gastos de representación.
Al Príncipe el Rey le da un sueldo. Este sueldo es parte del presupuesto anual de la Casa Real. Con él puede muy bien comprarse Vega Sicialias Únicos, Pinguses varios, ermitas cerradas o riojas viejunos. Es su sueldo, y todos hacemos lo que nos place con nuestro sueldo. El sueldo del Príncipe viene de los presupuestos generales del Estado, al igual que el sueldo de los profesores de la Educación Pública, personal sanitario, inspectores y subinspectores de Hacienda, o cualquier otro funcionario del Estado. No creo que a nadie se le ocurra fiscalizar los gastos a un maestro simplemente porque su sueldo viene de los impuestos de todos.
Otra cosa distinta es qué vinos bebe pagados con el dinero que el Estado le da para gastos de representación. Aquí, una vez más, no hemos de pensar solo en el P´rincipe sino en todos los funcionarios. ¿Está bien que el príncipe abra una botella de un Pingus, o L'Ermita o Viña El Pisón para bebérsela con algún príncipe amigo o en una reunión de trabajo de cualquier patronato? ¿O esos vinos deberían abrirse, si hay que abrirlos, solo en cenas de gala con otros jefes de Estado por el elevado precio de cada botella? Pero igual digo de los funcionarios: ¿Debe un rector de universidad o unos profesores que están celebrando una comida de trabajo, deben pedir vinos muy caros y cargarlos a la cuenta de la universidad o del colegio? ¿Deben los Consejeros de las Comunidades Autónomas ir a comer (por trabajo) a restaurantes de 75/100 euros el cubierto, vino aparte y cargar la factura a cuenta la Consejería?, y así todos los ejemplos que se te ocurran.
Para quien tenga curiosidad: soy profesor y cuando voy por razones de trabajo a comer a un restaurante procuro que sea uno barato y bueno y, desde luego, el vino es el de la casa. Los Aliones, Artadis Pagos Viejos, y otras maravillas las compro yo y me las bebo en casa con mis amigos o mi familia. (Me harta mucho ver a compañeros que en sus casas comen verduritas hervidas y filetes a la plancha y luego cuando van a un restaurante y no ellos no tienen que pagar piden los platos más caros).