Vino 8 del desafio VII, se veia claro que era moscatel, pero lo mande a Valencia.

V: Amarillo pajizo, casi transparente

N: Nariz con uva moscatel evidente, terpenico, pero tambien sale algo de piña y flores blancas. Buena intensidad.

B: Muy graso y suave, sedoso y con buena amplitud. Fruta tropical. Algo justo de acidez que hace que el dulzor aparezca algo excesivo. Buena persistencia.

Color amarillento.
en nariz se aprecia mucho dulzor, moscatel de libro, ligera fruta blanca.
en boca tiene muchísimo azúcar, se masca. Acidez la tiene, pero si fuera mayor se agradecería.
Los dulces de moscatel me gustan parecidos a este (donde el alcohol no se nota ni ataca), pero con mayor acidez. Aún así me ha gustado en pocas cantidades. El precio fuera de mi alcanze.

FASE VISUAL: color blanco pajizo, muy claro con reflejos dorados
FASE OLFATIVA: muy floral con algo de cítricos, fresca
FASE GUSTATIVA: goloso en boca. Muy dulce, corto de alcohol con lo que resulta muy suave y llega a tener un punto empalagoso. Mejor en nariz que en boca

Amarillo pálido.
Recuerdo de moscatel, con notas de mandarina, piña, papaya, algún recuerdo ahumado, monte bajo. En boca es dulce, denso, muy largo, volumen, muy agradable.

Moscatel de fácil identificación en varietal, en visual resalta su amarillo pajizo, para una olfativa de nítida uva, flores blancas, y algún despunte a naranja algo ácida.
Muy dulce en boca, obliga a decantarse: o te apasiona, o no te convence. Pienso que en poca cantidad tiene un pase. Y, desde luego, encanta a amigos míos con ninguna aspiración enológica(¿¿??).
El precio, un absurdo; lo siento

Interensante color amarillo pajizo, tremenda nariz a fruta blanca dulce y madura, lichis y durian. Tremendo tras 2 semanas abierto. Gran vino.

En la varietal, he fallado estrepitosamente, me fui a garnacha blanca.

Mi perfil de vino de dulce, el mejor de todos, aunque no pago lo que vale ni de coña, de este estilo tengo otros. De todos modos un fallito más que importa, se fué para Lanzarote y puse Malvasía. A parte de darme esos rasgos no creí que fuera también andaluz, y por lo tanto deseché la moscatel de alejandría que también rondó mi mente pero pensando más en mi tierra.
Color amarillo pajizo de excelente brillo.
Aroma fresco, flores blancas como un jazmín dulce, notas suaves de miel, con unos cítricos dulces del mejor caramelo de limón.
En boca pasa suave, es delicado y tiene elegancia, combina a la perfección el lógico dulzor con la frescura, tremendamente agradable.

Exquisito, es como decía el concepto de dulce que yo quiero, con frescura, para después de una comida saciante necesito algo así, que el postre me lo haga fácil y llevadero.

Amarillo pajizo con reflejos dorados, limpio y brillante con una lágrima densa y lenta.
Nariz: Buena tipicidad de la moscatel, desplegando aromas auvados, cáscara y flor de naranjo, presagia y ya el dulzor.

Boca: Muy dulce con buenas notas de moscatel pero justo de acidez para compensar el dulzor, untuoso y no demasiado largo.

Color amarillo pajizo brillante. Nariz media a almibar sin melocotón. En boca excesivamente dulce para mi gusto. Es como mosto blanco.

Quizás acusado por la ardua tarea de reembotellar, aparecen aromas a sulfuroso que requiere una amplia oxigenación, para que la fruta melosa, dulce, gustosa se muestre como debe ser de este un gran vino, aromas dulces entremezclados con notas ácidas que le aportan frescura procedente de apuntes cítricos, en boca meloso, envolvente a la vez que delicado y lleno de potencia y densidad.