Color picota, muy oscuro, capa alta, tonos amoratados,aspecto denso.

Agradece mucho la aireación, donde proporciona una agradable mezcla de fruta negra(ciruelas,zarzamora) con fruta roja en su punto de sazón(frambuesa, grosella) tendiendo a compotas.Más tarde van apareciendo unos finos tostados, mentoles, tofees, matices lácticos, sotobosque.

Las notas iniciales de su paso por boca son opulentas, voluminosas, con taninos que evolucionan a unas notas dulces que creemos llegarán a pasificadas...pero no. Aparecen unos detalles balsámicos muy oportunos que refrescan el conjunto, llegando a tener una buena acidez en el último tramo del recorrido. Trazas de manteca de cacao, bombón after eight. Bien estructurado, con profundidad y cierto recuerdo licoroso.

Caté este vino con grandes expectativas, conozco bien a los que lo han elaborado, y se que no harían nada a medias. Lo corrobora la botella cuidada, una etiqueta pulida, un corcho de gran calidad. En palabras de Ramón: "Un buen vino tiene que demostrarse hasta en los más pequeños detalles".
Inicialmente me dice poco en nariz, hay que dejarlo expresarse. Cuando suelta su timidez aparecen los frutos rojos fresco, junto a notas de bosque bajo y cueros. Algunos balsámicos.
En boca es donde el vino da por completo la talla. Buena acidez, y un equilibrio notable que hacen que mires dos o tres veces la etiqueta cuando te dicen que tiene 14,5º. No lo parece en absoluto. Notable elegancia y una tanicidad suficiente que hace que se augure una evolución prometedora.
La cosecha vendida completa, como corresponde. No había necesidad de alabarlo, pero siempre es bueno hacer justicia. Espero que los amigos podamos darle otro tiento.
Las dos botellas de la cena, duraron un suspiro, no hay mejor alabanza que se pueda hacer de uno, sin duda, grande.

Pueda parecer que mi opinión no sea fiable porque Juanma y Ramón son compañeros cata y sin embargo amigos.
Todo lo contrario. He diseccionado este escaso vino con mucho más sentido crítico que cualquier otro y simplemente con ánimo de echarles una mano en la búsqueda de la excelencia.
Ya son cinco bodegueros de 7 miembros los que han surgigo dentro del Grupo:
Vicente anda con los generosos, Alfredo de estrella de los vinos naturales, Antonio con sus Vinia Garre cada vez mejor y Ramón y Juanma con este Platinum renombrado a Valle del Botijas por temas de copyright con unos destiladores de caña de azúcar.

Lo primero que se ve al meterse en nariz este vino es que las tres hectáreas de Valtiendas, en Plena Ribera del Duero Segoviana, son un lugar privilegiado. Una limpidez aromática absoluta donde predominan violetas y frutillas rojas acompañadas por esa levedad de la barrica azuelada. Perfecta.
En boca, paso de terciopelo, con una estructura tánica y de acidez que soportan el todo. Vino amplio y sobre todo elegante.

Un gran trabajo de campo, un gran viñedo y unas grandes personas detrás. Pena que se nos hayan ido de Verema.

Felicidades si me leeis y no os deseo suerte por que debéis ser de los pocos que nada más salir tienen todo el bacalao vendido desde que entra la uva en la bodega.

A la vista presenta un picota cereza de capa más bien alta y ribete morado, límpido y brillante.

En nariz goza de buena intensidad, manifestándose como un vino en el que predominan las notas de frutas rojas y negras maduras, suaves tostados y notas a especias dulces. Todo ello con un fondo ligeramente balsámico.

En boca es potente y sabroso, con notable presencia tánica, que un mayor tiempo en botella deberá pulir. Su buena acidez le confiere frescura. Buen recorrido y notable persistencia.

Historia completa en el post http://www.vinowine.es/vinos-catados/cata-valle-del-botijas-2011.html