Vino tomado en formato magnum y a temperatura adecuada.
A la vista tiene color rojo picota, capa media-alta y ribete violáceo.
En nariz hay fruta roja y sobre todo negra sobre un fondo de cierta mineralidad pero todo ello un poco tapado por la crianza en madera.
En boca tiene un buen ataque, acidez correcta, tanino pulido, bastante fruta pero también bastante presente la madera.
Es una pena que una crianza de 6 meses haga que un vino tenga tanta madera tanto en nariz como en boca. Quizás habría que empezar a pensar en unos tostados más suaves o en utilizar las barricas durante más años para el vino más joven de la bodega.
Me dejas de piedra Alberto. Ese 2010 es un vino que tomamos con cierta frecuencia y apenas apreciamos un exceso de madera y si una buena integración. Lo que si es cierto es que todavía le falta botella y que los taninos están muy verdes. Me gustaría que lo probaras de nuevo en unos meses y me digas tú opinión que sin duda me interesa mucho porque tienes muy buen criterio.
Saludos
Es posible que yo esté un poco condicionado también porque últimamente estoy en una fase de mucho vino gallego y en la mayoría la madera es totalmente imperceptible porque usan barricas con muchos pases y tostados muy suaves.
En cualquier caso me ha parecido un vino muy correcto, bien hecho pero sí que me daba bastante madera. De hecho hace un tiempo tomamos Habla N 4 y 6 y me parecieron muy buenos vinos, eso sí muy potentes. Todavía me quedan un par de botellas del 6 así que tendré que abrir una en breve también.
Lo probaré de nuevo en un tiempo a ver si noto la madera más integrada ;-)
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