Ciertamente ha impresionado, visual, aromas y gusto han enamorado a los ocho integrantes de la mesa de cata. Tratamos de la Viura en un absoluto protagonismo, la esencia de las variedades blancas históricas de Rioja elaboradas por uno de los mejores viticultores de la zona.

Elaborado por la bodega Monge-Garbati, fundada en 2004, con tan sólo 4,6 ha. de viñas de Tempranillo, Viura y Malvasía, de una media de 30 años de antigüedad. Elaboran un vino con un gran trabajo de enología para salvaguardar lo mejor de la Viura y potenciar sus virtudes.

Inicialmente su visual nos aporta cremosidad, su perfil aromático seduce con notas entremezcladas de aromas primarios (fruta amarilla y lichis), secundarios (pan brioche) y terciarios (vainílicos) conjuntado en unas expresivas notas cítricas que concuerdan a la perfección con el peso de Ane para que no resulte pastoso ni pesado. Estructurado y graso en boca con buena acidez. El afamado y multicultural cocinero y amigo Samuel Perea, apuntó como plato ideal un Rodaballo salvaje con trufa blanca. Un pescado graso que ligaría con la textura de este espléndido Rioja y se vería refrescado por su carácter cítrico.

Cata realizada dentro de los vinos catados en la VI Mesa de Selección taninotanino vinos inteligentes