Rojo rubí, ribete rojizo, capa media.
Bien de intensidad en nariz donde se muestra delicado y profundo, con notas de pinot noir serio. Comienza tímidamente floral aunque poco a poco deja entrever una buena fruta roja madura, un marcado fondo terroso y mineral, especias, balsámicos, tabaco de pipa, ahumados y regalices. Complejo y cambiante, con mucho fondo.
En boca confirma registros y seduce por su buen equilibrio de facetas, con esa redondez frutal tan característica de la variedad pero con mucha garra, buena acidez y una cierta concentración, dejando en el final las sensaciones especiadas, terrosas y balsámicas, con un tanino noble y que se va integrando. Persistente.
Fiedrich Becker es el rey del spätburgunder, la pinot noir alemana, con vinos a menudo algo maderizados en su juventud pero que poseen una gran capacidad de envejecer y con mucha clase. Este GG es de corte más “Gevrey”, de mayor carga terrosa y tánica, serio y estructurado, de los mejores pinot catados fuera de Borgoña. No es barato eso sí, unos 70 euros.

Cata de spätburgunder aleman organizada por Boucherville en Zurich.
Seleccion de viniedo unico, el Kammerberg. De suaves pendientes, ocupa un emplazamiento privilegiado en el pago de Sommerberg. Fritz me decia que este pinot noir es el mas masculino de su portafolio, el ‘chambertin’ de su bodega: poderoso, opulento, nervioso. Repetire lo que ya dije: “Pues a mi no me ha parecido asi, luego de catarlo con calma dos veces”.

Igual que su hermano el Sankt Paul, este Kammerberg tiene un perfil singular, seductor, primario de momento, fresco y con acentos de lavanda y piedras quebradas. Es distinguido, casi etereo en su recorrido, sin mucho despliegue en el paladar medio pero el final es dulce y noble, de exquisita persistencia, sin la intensidad del Sankt Paul pero, de lejos, mas elegante. De masculino no tiene nada. Ahora que si insistes, concedo que es como Anibal de ninio jugando a las guerritas.