Rojo picota con ribete ligeramente granate. En nariz tiene muy buena intensidad unas notas tostadas, fruta negra, balsámicos y notas minerales. En boca tiene un ataque intenso, buen cuerpo, buena acidez y muy buena estructura, con unas notas lácteas finales muy ricas.

Picota vivo. Tiene una nariz intensa, expresiva, concentrada, con intensa sensaciones tostadas, atractiva mineralidad, recuerdos a fruta negra en sazón, sensaciones especiadas y algún toque vegetal. En boca el ataque es intenso, bastante corpulento, estructurado, con un tanino poderoso, dulce y carnoso, bien de acidez, largo y con notable peso de fruta en boca.

Botella 559.
Color rojo picota con ribete granate.
Nariz de buena intensidad con aromas de fruta madura, frutos rojos en aguardiente, ciruelas negras, muy balsámico, con notas unos toques tostados muy ricos y equilibrados, notas lácteas y un punto picante de pimienta rosa final.
En boca tiene una acidez muy buena, una entrada marcada por la potencia del vino, con el tanino aun presente pero bastante equilibrado, potente, amplio y de buen recorrido.

Buena garnacha.

Por lo que he podido leer de este vino, es el sueño personal de Silvia Tome, pues hay darle la enhorabuena, el sueño hecho realidad.
Lo mas destacable de este vino quizas sea la frescura, junto con la mineralidad y la elegancia en boca. No esperemos una bomba de potencia, pero si una complejidad en nariz y una armonia en boca que hechizan.
En nariz la fruta roja esta muy presente,junto con la mineralidad y los especiados , ligeros toques balsamicos y una madera que le deja el protagonismo a la fruta.
En boca tiene buena estructura, es mineral, buena acidez y sobre todo es muy fresco,buen equilibrio fruta madera, tiene un buen final,latgo y frutal

Botella 440 de 580.

Color cereza picota con menisco granate de capa muy alta.

Cautivadora nariz, intensa y compleja: yogur, rojas maduras, algún aromilla de pintura, balsámicos, minerales y pimienta negra.

En boca resulta más delgado de lo que anunciaba la visual, cremoso, atacando con amplitud y mostrándose equilibrado y pulido al paso. Es frutal, sin empalagos, con recuerdos a café e incluso tímidamente vegetal.

Largo, considerablemente largo.

... y lo que le queda...

Sugerente presentación, con botella borgoñesa y lograda etiqueta, simple y bien diseñada.