A la vista se presenta con un color picota, capa de intensidad media y los bordes con predominio del color color teja y con una lágrima muy ancha.

En la nariz de entrada una intensidad media a alta, con la fruta presente pero en escasa cantidad y la madera con detalles de ya evolución, como pueden ser los cueros.

Al paso por la boca, ya pasa fácil, pero no del todo, aun conserva su genio, con su puntito de acidez y una fase final de longitud media.

Vino que ya está en clara bajada, pero aun le falta en el caso de esta botella, para llegar a poderse calificar de caído totalmente, lo cual tras leer el comentario anterior de nuestro compañero, nos puede dar la idea de las diferencias que se pueden encontrar de una botella a otra.

Cata realizada con el club de catas del Círculo de Recreo, en las jornadas de vinos de Toro.

Cata ciega con otros 8 vinos de Toro

Vino estrella de la bodega Vega Saúco, con el nombre de su creador, Wences, pero se le ha pasado la hora...

V: Granate, ribete atejado, capa media. Mucho poso en suspension.

N: Sucio inicialmente, y apesar de que se va yendo quedan cueros y un fuerte olor metalico a lata de pescado.

B: Acuoso, con muchos cueros y poca persistencia.

Un desastre, en su epoca a lo mejor era bebible, pero hora ya no.