Oño, revisaba yo mis notas y de los Pintias el que más me ha gustado ha sido el de la cosecha inaugural (2001) precisamente por lo que dices... el tiempo en botella. Ni rastro de astringencia, aunque presidido por una corpulacia indudable. Un vino machote donde los haya y una lima para las encías si no le das tiempo (me pasó precisamente con este 2004).
Aún tengo por ahí otra del 2001 y una del 2006, que a saber cuándo caerá esta última.
Abrazo.