Vinazo de bobal sin paliativos: prácticamente perfecto ahora mismo

Botella bordelesa de hombros anchos de vidrio muy grueso y de mucho peso.

Abierto un poco antes de la cata y sin mucha decantación.

Visual

Rojo picota oscuro de capa alta con reflejos entre cereza y rubí, ribete cereza-transparente con ligeros atejados-anaranjados, limpio (salvo algo de poso al final de la botella), brillante y de bonita, abundante y fina lágrima de lenta caída.

Excelente visual para un vino de corte moderno de 14 años. (9,5)

Nariz

De alta intensidad y a otro nivel respecto del resto de vinos de la cata (y hubo bobales también interesantes, pero ni de lejos a este nivel).

Aromas a fruta negra madura en sazón, potentes balsámico-mentolados, notas de pino y eucalipto, tostados potentes, ahumados poderosos, toques de regaliz, especias, canela, clavo, toffee, chocolate, torrefactos, azúcar quemado de flanes, herbáceos de monte bajo, tomillo, recuerdos terrosos, un punto vegetal, un muy sutil toque de incienso y fondo de maderas de altísima calidad que envuelven todo el conjunto pero sin tapar en absoluto la fruta.

Intensísimo, fragante y complejísimo. Poco más se puede pedir a sus 14 años. (9,9)

Boca

Ataque potente y contundente pero, a la vez, fresco y elegante, con una acidez fantástica, de buen volumen que llena la boca y se expande pero sin empalagar, densidad media plus, cuerpo medio plus y gran estructura. Paso por boca de "guante de seda", taninos de "terciopelo", dulces pero poderosos y aún con mucho nervio aunque, por otro lado, ya muy bien pulidos y redondeados. Es un tanino perfecto pues es agradable, sabroso, redondo pero sin signo alguno de agotamiento, con garra, con fuerza (tanta que notas que el vino podría aguantar 6-8 años, como mínimo, sin problemas). 

El paso por boca es arrollador y apabullante, con una integración máxima de la acidez, la tanicidad, el alcohol, la fruta y las maderas, todo perfectamente ensamblado. 

El final es larguísimo, eterno con frutos negros en sazón, regaliz, mentolados, recuerdos de trufa, chocolate, herbáceos de monte bajo, azúcar quemado y fondo de finas maderas que lo rematan excepcionalmente bien; en vía retronasal el vino también es interminable con notas balsámicas, recuerdos terrosos, de incienso, monte bajo, canela, toffee y un montón de sensaciones complicadas de describir con palabras que lo redondean maravillosamente bien.

Boca maravillosa la de este Quincha Corral 2004, en este momento, a sus 14 años de vida. No se puede pedir más. Para beber sin descanso (10)

El vino está, por supuesto, en momento óptimo (y quizás lleve así ya varios años) y, EMHO, creo que está para disfrutar ya en el corto plazo (aunque tiene mimbres de sobra para aguantar 5-6-8 años más sin problemas).

Su PVP, en su día, rondaba los 50-55€ (ahora, las añadas más recientes, han subido hasta los 80-85€).

Puede parecer un precio caro, pero los vale tranquilamente. La RCP me parece excelente para lo que ofrece.

De los mejores tintos que he probado en los últimos tiempos.

Recomendado por 1 usuario
  1. #1

    jacomur

    Te cambio una del 2005, por otra del 2004. Saludos desde la Capital del Hojaldre, Torrelavega.

  2. #2

    Juanjosantos

    en respuesta a jacomur
    Ver mensaje de jacomur

    Jejeje, ojalá Javier ;-)

    La botella de este 2004 era de un amigo que organizó ayer una cata de bobales en Alicante. Una botella guardada durante años con mimo y que nos dejó a todos con la boca abierta. Cumplió con creces. Un vinazo total.

    Pude además repetir, yo solo me bebí de 100-125 ml, lo cual no está nada mal en una cata de 12 personas, con botellas de 750 ml en cada uno de los 8 vinos que catamos, y teniendo en cuenta lo bueno que estaba, casi que acaparé la botella para mí :P

    Me quedé solo, me recreé y pude tomar las suficientes notas sobre el mismo como para, con eso, y el recuerdo imborrable que me dejó el vino en todas sus fases, elaborar la nota de cata que has leído :-)

    Por tanto, aunque estoy buscando, de momento del 2004 no encuentro ya nada y no podría hacerte el cambiazo con ese 2005 que atesoras.

    Ábrete ese 2005 un día de estos (estará tremendo) o guárdalo para algún evento veremero en el que podamos coincidir y compartir el mismo jejeje ;-)

    Un abrazo

  3. #3

    jacomur

    en respuesta a Juanjosantos
    Ver mensaje de Juanjosantos

    Me quedan unas pocas botellas del 2005 y suelo abrir una por Nochebuena. Las tengo como "oro en paño". Las del 2004 hace años que no tengo ninguna. Me las bebí todas en su día. Sin ningún género de dudas el Quincha Corral, en cualquiera de sus añadas, es el mejor vino de bobal que se elabora en España y parte del extranjero. Saludos desde la Capital del Hojaldre, Torrelavega.

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