Tú eres el Champagne

Casi tres años después volvemos a encontrarnos. Sigues igual, no has cambiado. Esa nariz portentosamente armónica y profunda, de enorme definición. Y ese paso por boca que arrasa con todo, pleno de potencia, pleno de acidez, pleno de sabor, lleno de persistencia. No me cabe duda de que si volvemos a vernos en más años seguirás estando igual, pero qué quieres que te diga: lo importante es que nos sigamos viendo y que nos demos las gracias de poder seguir disfrutando de estos breves pero intensos encuentros.

Tú eres el Champagne. Y sobran más palabras.

Recomendado por 2 usuarios

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar