Color muy cubierto. Nariz extraordinaria, muy potente y larga. Des del

Color muy cubierto. Nariz extraordinaria, muy potente y larga. Des del mismo momento de abrir la botella (más de dos horas antes de la cata) aparece una impresionante cascada de matices muy maduros y envolventes que no termina ni con la última gota (¡la copa vacía sigue oliendo bien!). Sorprende la enorme madurez de un vino que, en principio, no debería ser consumido hasta dentro de varios años. En boca es redondo y pleno, delicioso, muy elegante. Sedoso y hasta con leves toques de compota de fruta. Me esperaba un vino mucho más duro. Esta maavillosa dulcedumbre se combina muy bien con unos taninos presentes y de gran calidad. Muy cncentrado. Un vino memorable, grande. No puedo imaginar su evolución en el tiempo pero, estando ahora mismo tan rico, ¿qué importa?