Amarillo pajizo ligeramente apagado. Nariz de intensidad media, compleja,

Amarillo pajizo ligeramente apagado.
Nariz de intensidad media, compleja, en donde destacan las notas de cítricos, especialmente limón (piel) sobre un fondo mineral. Ligeros aromas avainillados, muy elegantes, que denotan un buen trabajo con la madera.
En boca está muy conjuntado y resulta muy fresco, pero a la vez con cuerpo. La madera se hace notar, pero siempre con mucha elegancia, suma y no resta. Muy buena acidez que le da ese toque refrescante y hace pensar que evolucionará positivamente. Un ejemplo de lo que tiene que ser una Garnacha Blanca bien vinificada. Muy bueno, pero un poco caro, eso si (30 Euros).