Amarillo dorado.
Nariz de carácter maduro, con recuerdos a fruta compotada, toques herbáceos y suaves recuerdos a manzana verde.
En boca es sabroso, goloso, con buena acidez, excelente integración del carbónico y con gran estructura. En el retronasal aparecen toques de manzana.
PVP aprox. 46€

Dorado brillante, burbuja pequeña y escasa.
Media intensidad en una nariz llena de encantos por su balance entre complejidad y frescura. Tonos de frutas blancas en madurez, piel cítrica, ligeros ahumados, un marcado fondo mineral, trazas especiadas y herbáceas, un punto de frutos secos, balsámicos. Equilibrio.
En boca es igualmente una delicia que se mantiene en plena forma, excelente acidez, paso limpio y cremoso, final largo y con amplitud dejando de nuevo las sensaciones de frutas maduras y un posgusto meramente mineral, con alguna traza ahumada. Carbónico perfectamente integrado.
Gosset es una casa muy de nuestro gusto que hace unos Champagnes de gran fiabilidad, siendo este Grand Millesimé uno de sus puntales en calidad. Este 93 está en plena forma y en un momento de consumo ideal porque aúna perfectamente los registros de juventud y madurez en un conjunto realmente encantador. Magnífico.

Dorado con algún reflejo verdoso, limpio, brillante y con una suficiente burbuja.
Abrimos la botella y comprobamos que todo está en su sitio; los aromas son los típicos de un Champagne maduro al que todavía le queda mucha fruta: manzana asada, uva blanca, compotas, canela, especias de monte bajo, fósforo, madera húmeda y piedras.
Estructura, complejidad y redondez en boca. Paso glicérico y armado. Estupenda acidez. Magnífica integración del carbónico, frágil pero aún presente, y de la barrica. Notas similares a las ya descritas anteriormente.
Final largo.
Un Gosset que nos ha hecho disfrutar de lo lindo, a precio de amigo.