Empezamos las catas del segundo trimestre ya desde Cuenca (Ecuador). Decir que el terremoto del pasado 16 de Abril no ha afectado en nada a esta preciosa ciudad, pero desde aquí mis condolencias a todo un país que ha sido brutalmente afectado, especialmente en la costa norte.

Y entrando ya en materia hoy tenemos un vino del Penedés de esos que me llama la atención por sus puntuaciones en las guías y su precio. Abrimos la botella y la dejamos respirar por espacio de una hora. Servimos a 16°C.

VISUAL: Presenta un precioso color rojo picota de capa muy alta con el ribete granate con reflejos violáceos. De lágrima gruesa, abundante y transparente (94).

OLFATIVA: A copa parada se aprecian fuertes aromas de fruta roja, de compota de moras y un cierto carácter ahumado. Al agitar aparecen especiados de pimienta negra y clavo, fúngicos de trufa negra y un toque alcanforado al que acompañan sutiles recuerdos minerales de tinta china. Los terciarios también tienen su protagonismo con la aparición de notas de chocolate, tabaco negro y cuero ruso. Al final existe un final balsámico con elegantes aromas mentolados de eucalipto y vips-vaporub. Una gozada en nariz, complejidad maravillosa y de alta intensidad. Creo que el coupage está muy acertado (92).

GUSTATIVA: En boca nos encontramos con un vino amplio, de buen ataque, con una tanicidad muy marcada y de acidez media. Realmente su astringencia es alta, casi perturbadora. En el retrogusto apreciamos notas de guindas en licor, aromas de pimiento rojo y de olivada negra. Su persistencia de unos dos minutos y medio. Considero que todavía está un tanto verde y que debemos de dejarle unos añitos para que suavice esos taninos tan agresivos. Recomiendo esperar un mínimo de dos años antes de bebérselo, pide botella a gritos. Sensacional en nariz, exagerada astringencia en boca. Un vino muy "Parkerizado", demasiado para mi gusto (78).

La RCP la considero buena siempre y cuando esos taninos se dulcifiquen un poco.

Lo maridamos con un pollo al ajillo salteado con verduras. El vino realmente pedía lago más contundente aunque esos ajitos sí necesitaban de un vino similar. Al final la combinación creo que fue bastante acertada.