Fino Quinta, nuevas maneras.
Color amarillo dorado pálido.
Fragante, te lleva hacía la crianza en flor pero de otra forma, es más suave y poco punzante, gana o sobresale la frescura, la fruta y la albariza. Lo que si muestran son las típicas notas a manzanilla seca, fruta blanca, avellana tanto seca como fresca, flor de mimosa, alcohol envolvente y aromático, amplio y de nuevo he de destacar la frescura, el conjunto y las nuevas maneras sin renegar de su identidad.
En boca la entrada ¡cómo no! es fresca y ligera, quizás más en la forma que en el fondo. Tacto seco y paladeante, alcohol potente y nada hiriente, se gusta y atrapa. Punto recio y amplio, se hace ancho en el paladar, lo llena y le dota de nervio y fortaleza. Lo paladeas una y otra vez, se saborea e invita al trago.