Producción muy pequeña de un gran cariñena de viñas viejas, aproximadamente 600 botellas.

Color rojo cereza oscuro con ribete granatoso.

Nariz que en el principio aparecen lacas y pegamentos, pero desaparecen con la aireación para dar paso a la fruta madura, la crianza se deja ver pero muy bien integrada con toques tostados y especiados, fondo mineral.

En boca es una delicia, con excelente acidez, fresco a pesar de la potencia, mucha estructura, con gran equilibrio entre la fruta y la crianza, notas especiadas, final largo y muy placentero con marcado carácter mineral y afrutado.

De los mejores prioratos que he probado últimamente, con las características típicas de los vinos de la zona y con esos matices que en muchos de ellos se presentan como "defectos", en este caso en dosis correctas para convertirse en registros agradables. Mineralidad muy valorable, como chupar un lapicero, fruta muy viva en un vino de más de 5 años, lacteos, ese toque aldehídico , pegamento en tan poca medida que se capta como un matiz más, olivas. Un vino completo con una tanicidad muy pulida, buen paso por boca. Caro, pero comprado en la misma bodega por Latrufa y Marta, es decir, baratisimo para los demás