Llevamnos a unos amigos a este paradisiaco restaurante la semana pasada, los cuales quedaron exahustos de calidad y cantidad de platos que tomamos de este preciado animal acuatico. En otros muchos restaurantes de la zona, Zahara, Conil, donde tambien tiene tradicion almadrabera, no he encontrado sitio que lo trabajen de la misma manera. Es evidente que hablamos de algo, que no solo por la calidad de su carne, sino por su escasez, es caro, por lo que muchos sitios no lo tienen a su alcance. El Campero rompe todos los niveles. El tartar de morrilo se desliza por la boca como si la lengua fuese un tobogan, el contramormo y el mormo al horno delicadisima textura y sutil sabor, el tarantelo a la plancha, con sal maldon, una explosion de sabor, y el sashimi de ventresca parece inyectado por un cirujano con esa maravillosa y curativa grasa, que cuando roza las paplilas con esa mezcla de soja y wasabi, estan aplauden a su paso,inclinandose y pidiendo mas.
Sin lugar a dudas, hay que conocerlo y experimentarlo. Eso si, tambien hay que pagarlo....

Después de nuestra visita hace un par de años y debido a la malísima experiencia nos habíamos negado a volver, pero animados por muchos de los amigos foreros y no con pocos miedos, nos acercamos a cenar a este restaurante.
En esta ocasión cenamos en la terraza exterior, y todos nos inclinamos por el atún y platos al centro, decir que es fue una gozada, difícil decantarse por algunas de las opciones elegidas, delicioso el combinado de almadraba, especialmente el apartado al atún en escabeche, bueno el atún encebollado, igual que al horno, sublime el morrillo o el tarantelo.
La carta de vinos necesita una mejora urgente, lo mejor que encontramos fue un José Pariente, muy extendido en la zona.
Bien los postres como el flan con piñones y el lingote de chocolate, acompañado con un generoso chupito de vodka pancracio.
El servicio un poco cascarrabias, pero comparado con nuestra anterior experiencia una gozada.
Mejoro la opinión que teníamos.

El mejor atún del mundo, impresionante se tome como se tome.
El morrillo sublime, sublime, sublime, qué jugosidad, qué textura, se me hace la boca agua recordándolo.
El Sashimi muy bueno, algo frío de más quizás
el atún al horno sorprendentemente jugoso, dos tacos de contramormo (de debajo del morrillo, creo, esa es otra, se aprende la anatomía del atún por aquí a base de bien)
Los medallones de atún con salsa de piñones también muy ricos, más tipo guiso.
La ventresca... es otra cosa, no tiene nada que ver con la ventresca de atún que se sirve en el resto dle mundo, para empezar, es una pieza gruesa de un animal enorme, cortada en perpendicular respecto a la raspa, y no en paralelo como se ve cuando son atunes más pequeños. Jugosísima, y en su punto justo de plancha.
La costa de Cádiz es un lugar único para comer este plato tan local como el atún rojo de almadraba, impresionante, espero que esto siga muchos años más y que no desaparezca la especie.
Servicio muy atento, buen servicio del vino, postres muy ricos, y una buena variedad de vinos de postre, lo mejor es dejarse recomendar por el chef, la estrella es, cómo no, el PX.
Las mesas muy espaciadas, decoración muy cuidada, y a pesar de estar en la sala de fumadores, estábamos a 3 metros de cualquier fumador, no olía nada a tabaco. Además, fue hasta fácil aparcar en las inmediaciones.
Barato no es, pero es que es algo extraordinario, único, es como una denominación de origen única, y por eso salí tan encantado que posiblemente vuelva a ir de tapeo hoy al mediodía a probar el tataki de atún que tenía muy buena pinta...
IMPRESCINDIBLE

Nueva visita, teníamos pendiente venir en la temporada de atún de almadraba de derecho, y a fe que hicimos pero que muy bien.
Nos hicimos un menú monográfico de atún (salvo el postre, que aún no tienen de atún, pero todo se andará...): empezamos con dos medias razones en platos que se brindaban a ello, unas brochetitas de atún en tempura buenas pero que luego se revelaron como lo más flojo de la jornada, y una lasaña fría de atún (en pasta de arroz) que nos sorprendió y encantó a partes iguales.
Continuamos con un tartar de atún excepcional, magníficamente macerado y con su punto de sal Maldon, y luego con la estrella de la casa, que no falte nunca, su excepcional morrillo a la plancha.
Para acabar aún tomamos una ijada en salsa de melocotón y Pedro Ximénez, que puede parecer un revoltillo extraño, pero nada de eso, una fusión de sabores espléndida.
Regamos con un Pago de Carraovejas 2005, el servicio del vino es solamente correcto, descorche, prueba y para de contar, ni servir en las copas.
Finalmente tomamos un buen postre, lingote de chocolate con salsa de menta y helado de regaliz, bueno pero por debajo de la fantástica comida que habíamos tenido.
Invitaron a los chupitos (orujo de hierbas y vodka chocolate Pancracio).
El servicio, sin ser malo, deberían mejorarlo para estar en consonancia con la cocina, el camarero no puede venir diciendo "allá va el morrillo", ni no cambiar plato ni cubiertos en toda la comida.
Aunque la valoración global es positiva por supuesto, repetiremos y es un sitio a donde traer visitas de fuera de la zona.
Pero si de cocina hablásemos solamente, estamos ante uno de los mejores restaurantes de pescado (y específicamente, de atún) de España.

He leído algunos comentarios anteriores y no reconozco el lugar según lo viví yo el sábado 23 de mayo.
El lugar lo encontré cómodo y espacioso. Tanto las mesas como su equipamiento. Tal vez lean estas cosas y van tomando nota.
La comida, bueno yo iba por el atún, lo encontré excelente.
Sashimi de ventresca, (lástima que verema no admita fotos de mas de 300 Kb, tengo otra mejor), morrillo a la plancha y salmonete para finalizar. Un postre original y sabroso.
De vino no hice mucho uso pues me volvía a Valencia nada más comer. Granbazán etiqueta verde.
El servicio impecable, con buenas sugerencias y acertadas, como recomendarme medias raciones en lugar de enteras para probar más platos de atún, lo que agradecí.
Es una pena que a los demás no os haya ido igual que a mí.
El precio me pareció correcto

http://www.ojoalplato.com/archives/1580

Estuvimos unas amigas el 1 de mayo, era la primera vez y fue una pasada. Morrillo de atun que sabia a dioses, tataki de atun de joyeria de lujo igual el sasimi, pinchos variados todos muy buenos. Bebimos un palo cortado y salimos a 30 euros persona

Restaurante especializado en atún de almadraba de derecho, su propietario, José Melero, ha dado alguna clase magistral del uso en la cocina de cualquier recóndita y desconocida parte del atún durante el congreso Lo Mejor de la Gastronomía de San Sebastián, atentamente seguido por los Adriá, Berasategui, Arzak, etc.
Todos los platos de atún, magistrales. Pero fantástico un excepcional morrillo, de gran sabor pese a tenerlo congelado (a -80ºC en cámaras especiales) simplemente a la plancha, con una salsa aparte, buena pero innecesaria. También exquisitos tartar de atún y ventresca, y platos de todas sus partes: mormo, contramormo, galetes, tarantelo, tataki de lomo de atún, etc.
Los pescados también suelen rayar a muy buen nivel: lubina, besugo, bocinegro, urta, etc.
Carnes puramente testimoniales.
Postres normalitos, bodega bastante completa en blancos, tomamos Terras Gauda (20,5 €), y de postre unas copitas de tres P.X. para comparar: El Candado, Noé y Maestro Sierra Viejísimo, excepcionales ambos los dos últimos.
Precios altos, en consonancia con la calidad.
La próxima vez hemos de venir en Mayo, en plena temporada de pesca del atún de derecho, en donde realizan un menú completo de atún fresco que debe ser de campeonato.

Repetimos dada la experiencia del año pasado. Nueva cena para 3 pax. Ha mejorado el servicio. Unas tristes aceitunas de aperitivo (cubiertos y servicio 3x1,80€)
Pedimos Tataky de atún muy bueno, una ensalada mixta completa y 3 tortillitas de verduritas (muy bien fritas).
De segundo: Un lenguado plancha perfecto y un bocinegro de 850gr (pargo???) a la espalda para 2 (insuperable el punto).
Los postres mejor que el año pasado: 1 mousse de queso y una peras al vino.
Vino: Creo que la carta se ha hecho más ambiciosa con más vinos tintos de corte moderno, especialmente Riojas y Riberas (Sierra Cantabria Col. Privada, Rodas, etc). Sigo echando en falta más blancos fermentados en barrica. Pedimos Gran Bazán Ambar 2007 (20,50€ inc. IVA) perfecto de temperatura. Total: 158,9€ (inc. IVA)

Uno de los restaurantes más interesantes de la provincia de Cádiz, donde se se puede degustar, posiblemente, el mejor atún de almadraba de España. Lástima que en la fecha de la visita no ofrezcan el menú degustación de esta perla del estrecho (creo que si se sirve en primavera y principios del verano), por lo que tuvimos que conformarnos con probar tarantelo, galetes y morrillo, piezas del atún que resultaron deliciosas, especialmente estas dos últimas. Seguidamente nos sirvieron un besugo a la espalda francamente bueno. Los postres creo recordar que también están a la altura, así como el servicio del vino. La atención al cliente resulta, sin embargo, un poco fría y distante. Los precios son más que correctos.

Dificil valorar un restaurante que pasa de lo divino a lo humano con tanta facilidad.

La barra de la entrada te recibe con un expositor de pescados que practicamente te invita a quedarte, pasas al comedor de fumadores y te encuentras mesas amplias y con separación suficiente. Los crios no tenian vetado el acceso a esta zona??? no se.

Pides un vermú y te lo sirven en un vaso sucio y rallado, que debería estar en la basura hace tiempo.

El atún, tanto el morrillo como el combinado sublimes, las gambas impresionantes, sin embargo el solomillo de retinto demasiado duro, aunque sabroso.

La ensalada de cogollos y anchoas para olvidar, mal aliñada, insipida.

Los postres bien presentados pero impersonales, todos los que probamos la cuajada no la identificamos como tal, sino como un helado de vainilla¡¡¿¿??!! que muy amablemnte fué sustituida por un tocino de cielo.

El orden en el que pides la comanda no tiene porque ser el orden en el que se sirvan los platos, ya que se pueden producir incongruencias, como ha sido el caso.

La espera entre plato y plato me ha llevado dos cigarros, desesperante. Deberían considerar revisar parte de la cristalería.

Carta de vinos limitada, normalita. Servicio de sala y vino correcto, aunque no entiendo porque teniendo copas en condiciones te sirven de primeras en copas inadecuadas.