Hace tiempo que soy cliente. Me gusta la carta de vinos; por eso no le doy importancia a la tabureta, a la falta de ventilación y a la escasez de variedad en la comida que acompaña al vino que voy a difrutar....sin embargo me dejo allí cuarenta euros por comensal en cada visita y considero que dadas las penalidades que acarrean la falta de local y el precio medio..... el trato debería ser excelente (que no cursi). No dudo que quien atienda sepa más de vinos que muchos clientes, pero la prepotencia no es nada moderna, dar a catar un vino sabiendo que está en buen estado (porque lo ha olido el profesional) solo por hacer el paripé y que un comensal inexperto tenga que hacer el teatro de saber lo que huele ante la mirada arrogante del camarero y/o propietario no tiene razón de ser.... es un requisito obsoleto y absurdo desde mi punto de vista. La humildad y la cercanía enganchan, todos estamos aprendiendo sobre vino en cada sorbo, nadie está en la cima de la sabiduría... ¿por qué noto que me miran mal desde allí cuando no encuentro la grosella en mi pituitaria? ........ volveré a seguir catando.Gracias.

Después de leer los comentarios, me quedé decepcionado. El local pequeño e incómodo. La carta de vinos descompensada. Se echa en falta alguna referencia clásica. El steak tartar falto de condimento y de preparación. El estofado de ciervo demasiado duro, y el carpaccio de buey bueno. De todas formas, la carta no es muy amplia. La atención del personal muy correcta. En definitiva, un sitio para no repetir.

Uno de mis favoritos de Valencia y del que soy un cliente bastante habitual. La carta de vinos es impresionante (tanto secos como dulces), siendo muy recomendable dejarte llevar por las recomendaciones de Luca (creo que se llama así), y el servicio muy correcto. La carta, aunque un poco restringida y pendiente de que se actualice o cambie más asiduamente es bastante buena, destacando el steack tartar, el milhojas de foie y la torta del casar, servida como si fuera una fondue. Las cantidades bastante amplias, incluso es conveniente pedir medias raciones. La RCP es muy muy buena, de lo mejor en Valencia que conozca. Lo único malo puede ser el sitio en sí, no muy cómodo, y cómo se nota cuando no está Luca, pues quienes le sustituyen no son ni tan atentos, ni cercanos ni profesionales. Seguiré visitándolo muy asiduamente.

Uno de mis favoritos para una cena informal. Espectacular el estofado de ciervo. Recomendable el steak tartar, las habitas y los carpaccios. Lo mejor la bodega y su RCP.

Muy muy recomendable

Local agradable e informal
tapas bastante buenas que pudes maridar con diferentes vinos
servicio atento
buena rcp

Buen restaurante en una zona con encanto en el barrio del Carmen. Las mesas de dentro un poco pegadas, a partir del buen tiempo ponen terraza fuera, NI PISARLA. Maleantes molestan molestan bastante, pero nidos de palomas en las balconadas de arriba hacen que te puedas llevar alguna sorpresa desagradable. No tiene cocina, por lo que toda la comida es fría; es un sitio que suelo usar para probar vinos que no conozco a recomendación del dueño. Lo único criticable, es que suele estar demasiado lleno y el servicio es un poco alocado.

Buena RCP. Recomendable.

Local incomodo y ruidoso, bien regentado por Moisés y Diego.
Platos bien presentados, precio equilibrado y buena atención.
A la carta de vinos le hace falta un restiling en serio, tiene mmuchos vinos insulsos, sin emoción y falsamente modernos.
Buena oferta de vinos por copas, aunque salen mucho más caros que pedidos por botellas, al igual que en muchos otros sitios, a los que nos gusta el vino por copas, nos penalizan con los precios.
A las copas les sucede lo mismo, deberían ser de mejor calidad.
En un espacio tan pequeño, dejar fumar es muy agresivo para la gente que no lo hace y para el vino.
Deben mejorar muchos detalles, pero aquí se respira afición al vino, y eso me gusta.

Acogedor lugar situado en la, poblada de restaurantes, Calle Roteros de Valencia. Resulta uno de mis lugares favoritos para ir a cenar. La carta de vinos, siempre en evolución, es más que interesante y presenta buenas propuestas de muchas D.O., además los menos entendidos pueden dejarse aconsejar. Interesante propuesta de vinos por copas. La comida excelente, basada en armoniosas ensaladas, carpaccios, tartar, y exquisitos entrantes en continuo cambio. Para recomendar el tartar de atun, carpaccio de buey, steak tartar y ensalada de espinacas. También propuestas fuera de carta como las exquisitas milhojas de foie. Un lugar que merece la pena visitar, imprescindible reservar. RCP adecuada, unos 25-30 euros p/p consumiendo vinos de 15 euros la botella.

Viernes noche a las 9. Lleno como siempre. Llegamos la avanzadilla, un amigo y yo, ey mpezamos tomando 2 copas de tinto;Alaia tempranillo/prieto picudo, a seguir,muy bueno y un Heretat de Tavernes, no me gusto. Nos ponemos en barra, por gusto, y así poder charlar con el dueño. Empezamos con una carrillada muy buena. Viene el 2º grupo, abrimos un Ànima Negra, se decanta. Bueno, 30€?. Probamos Tartar de Atún y Mango, buenísimo. Steak Tartar con pimienta verde y pepinillo, tremendo. Abrimos un Embruix, se decanta. Torta del Casar, buena presentación y una rueda de quesos que acabamos con un Borsao 3 picos, especial... Aviso que está a 9,95 en Lavinia.es... Los postres... impresioanantes. Todo comida elaborada casi en tu cara pues es bastante sencilla de preparar. Y no entiendo el comentario anterior sobre la poca cantidad de vinos por copas, de tinto cuando fuí habría 15, 6 o 7 blancos, y 3 rosados... Que me diga donde puedo ir a probar más... De precio muy bien, éramos 5 y salimos a unos 35€... El vino está más barato algunas veces que en tiendas

Local pequeño de decoración minimalista, situado en el barrio del Carmen. El mobiliario constituye el único "pero" banquetas y mesas altas no demasiado comodas.

Se pueden tomar una selección (corta) de vinos por copas, o por botellas de una amplia carta, moderna, bien elaborada y lo mejor con unos precios increibles, algunos de ellos los encontré incluso más baratos que en ECI. Los vinos se guardan climatizados y tanto el servicio como el tratamiento que se le da al vino son muy buenos (cristaleria, decantadores, etc.)

La comida está elabarada con materias primas de mucha calidad y bien resuelta: ensaladas, carpaccios, quesos, ibéricos, tartares, revueltos, habitas baby, etc.

Muy recomendable. Imprescindible reservar si sois más de dos.