Fuimos durante la Fira del vi de este año 2011, (1 mayo 2011), reservamos mesa nada más llegar a Falset sobre las 11:00h ya que pensábamos estaría lleno a la hora de comer, cosa que ocurrió, a las 15:00h restaurante a tope, incluso la sala que han acondicionado adosada al local original.
Mantelería y cubertería normalita, copas bien, ambiente algo cargado y ruidoso, buena separación entre comensales, servicio algo flojo, lentos los primeros platos y los últimos casi no te daba tiempo a acabar.
Comimos el menú de la Fira del Vi 2011, solamente servían este menú que se componía de;

Aperitivos; el vermut de los domingos actualizado (un berberecho, salsa de vermut, espuma de bitter) y chupa- chup de queso de cabra y frambuesas.

Platos; Coca de butifarra negra, manzana y espinacas baby “Eco” y setas.

Crema de guisantes, espárragos, yema de huevo de pagés cocido aal vapor, piñones y migas de aceite de chorizo.

Terrina de pulpo de roca confitado, “empedrat”, escalibada i pan de olivas.

Albóndigas de ternera “Eco” de los Pirineos, espuma de patata, aceite de picada catalana y brocheta de vieira.

Peras al vino, especias, helado de mato “artesano”, coc de avellana y chocolate “Creo”.

Cafés con los que sirvieros petits – fours (almendras tostadas y rebozadas con polvo de cacao)

Todo ello 30€(sin vino), la verdad que lo encontré todo muy bueno casi exquisito, pero no espectacular.
Más el vino un Vino Flor de Primavera Peraj Ha'Abib 2006. Carta de vino bastante bien lograda, precios ajustados con los vinos de la tierra, cosa que es de agradecer y bastante variedad de vinos nacionales.
El servicio de vino solo un 5 ya que el "sumiller" que nos sirvió, apenas sabía abrir la botella, sacó el corcho destrozado y eso que estaba en buenas condiciones.

Con carta y menú basados en productos ecológicos y de Km. 0, este pequeño restaurante ubicado casi en el centro de Falset, ofrece además una carta con casi 50 referencias de vinos de Priorat y Montsant exclusivamente, a precio de tienda.
El servicio aunque se puede mejorar (no nos pusieron pan, y luego lo incluyeron en la cuenta), está a la altura. La cocina riquísima, con platos sencillos, pero de buena calidad y bien ejecutados. Te sirven un aperitivo dentro de una lata de conserva, consistente en un mejillón, aceitunas y espuma de Campari. Nos pedimos buñuelos de bacalao, croquetas de perdices, croquetas de jamón (riquísimas), y como platos principales, pollo ecológico con salsa y guisantes y una hamburguesa ecologica con cebolla y pan de aceitunas (que no se veía por ningún sitio).
Para beber un Coma Vella 2007

Tras la visita con un grupo a las bodegas de Clos Dominic, había reservado en Quinoa, para volver a probar la cocina de Matías en fin de semana, tal y como comenté anteriormente.

Llamé al restaurante desde Porrera porque salíamos tarde de la visita y quise avisar del retraso y además añadir a tres personas más a la comida. A pesar de haber hecho la reserva con varios días de antelación, la camarera que me atendió al teléfono no tenía constancia de ésta. Luego sería el propio Matías que se disculparía por no haberla apuntado en el libro debido a un despiste.

Como éramos un grupo de 10 personas (2 niñas) probamos todos los platos que había: Ensalada de habitas, jamón de pato y naranja; Pasta fresca con salsa de foie y avellanas y Coca con espárragos trigueros con queso de cabra, rúcula y olivada.

Segundos platos: Crujiente de cordero, vino y cremoso de patata; Rustido de pato, coliflor y naranja y arroz con gamba, almejas y boletus con un buen punto de cocción pero para los que lo comimos, coincidimos en que estaba salado, no mucho, un pelín.

Postres: Crema de chocolate, coco y crumble, Crema de manzana, miel y requesón, que creó algunos imprevistos, ya que la camarera dijo que la crema era de piña y a la hora de servirlo, hubo discrepancias; crema de manzana, miel y requesón que estaba bueno y un couland de chocolate en toda regla y toffe.

Las niñas comieron Macarrones y pollo a la plancha y de postre, helado de chocolate.

Después de la cata vertical que hicimos con Domi y dado que después teníamos el viaje de vuelta, optamos por beber agua.

Lo importante es que el conjunto estaba contento de la propuesta recibida.

Puede que el número de comentarios y tan buenas referencias nos suscitaran grandes expectativas para este restaurante que acabaron por volverse en su contra.
Fuimos a comer entre setmana y dado que la cambrera nos insistió repetidamente que no pidiéramos carta porque tardarian mucho escogimos menú, lasagna (justa sin ningún secreto) y ensalada de invierno (una suma sin ton ni son de ingredientes) de primero y dos timbales de butifarra con patata,chorizo y all-i-oli ... correcto pero muy discreto, vino de mesa y de postres un mousse de iogurt com higos ( parecia una tarrina prefabricada) y sopa de melocotón com espuma de iogurt ( la espuma parecia nata de spray). 14 euros cada menú, discrepo con las referencias de buena calidad precio.

Es una grata sorpresa encontrar un restaurante de tanto nivel y con una R-C-P,para mi imbatible,Matias el cocinero con quien estuvimos hablando,me parecio una persona normal y para los tiempos que corren ya es mucho.Felicidades Matias,por habernos hecho pasar una velada tan agradable,a ti y todo tu equipo

Bajé a Falset en mi día de fiesta para luego pasar por Clos Dominic a coger una caja de vino porque hacía tiempo que me habían recomendado el restaurante y estuve comiendo el menú de mediodía. El servicio atento

Es un local que está situado en la calle principal. Ensalada de frutos de otoño (higos, kicos o maiz tostado y granada); Butifarra artesana (por cierto muy buena) con puré de alubias blancas y sofrito (para mi gusto, bastante fuerte) y un pastel de plátano y chocolate muy bueno que incluso pregunté (no siendo la única) cómo lo había hecho. Copa de vino tinto de la Cooperativa de Falset. El comedor estaba lleno supongo que de gente que trabaja por la zona. Dispone de un Plan Quinoa por 25 euros + IVA que tenía muy buena pinta y que intentaré probar.

Grata sorpresa este local de restauración en la localidad de Falset. Al principio nos costó localizarlo , y eso que está en la calle principal, puesto que el cartel que indicaba su ubicación se habí enrrollado por el viento. Bueno al grano. Fuimos a comer el Domingo, este día disponían de un meno de tres primeros, tres segundos y tres postres con vino de la casa ( DO Montsant) por 20 euros. Ciertamente la oferta es buena ya que la comida era excelente. Pedimos de primero arroz negro y sopa de tomate con berberechos y mejillones ( muy buena , me recordaba al gazpacho , estaba fría la sopa) ; de segundo robo de toro conn espuma de patata , excelente. Postres: tiramisú y
Nosostros pedimos carta de vino aunque había vino de la casa. Pedimos , haber si lo escribo bien , " embruix de vall Lach", muy bueno aunque potente, potente (15,5º) 18 euros.

Total: 64 euros con cafes.

Merece la pena ir a comer, disponen de carta pero ese día sólo disponían de menú por escasez de personal en la cocina.

Buenas de nuevo. Hoy he tenido oportunidad de degustar de nuevo los platos de Matías. Despúes de la resaca de la feria del vino he comprovado que el nivel sigue siendo altísimo. Os recomiendo veáis los platos y que tan pronto podáis, acudáis a probarlos. Por cierto, si os interesa como se confeccionan, preguntad, preguntad, preguntad.

Cuando hicimos la reseba en este restaurante el camarero nos comunico que hacían un menú degustación maridado.
El restaurante es de apariencia sencilla, pero aquí a lo que seva es a la bistromania que se elabora últimamente, alta cocina a precios asequibles.
El local vestido de piedra, tonos rojizos y manteles blancos, los camareos/a negros de arriba a bajo.
El menú fue fabuloso a destacar el mosaico de gambas, macadamia y cítricos maridado con un Etim blanc 100% garnacha, el magret de pato con sepia, puerro y una salsita de soja también muy rico acompañado de una copa de cava RovertjMurt que ayudaba a limpiarte la boca después de comértelo, pedimos una copa de mas a la camarera y no nos la cobro eso es un detalle y se agradece.Abia algo de colapso pero para nada se deslució la comida, los camareros lo supieron llevar bien.
El postre también muy rico un bizcochito de chocolate con fresas maceradas y espuma de vainilla con una mistela de la Cooperativa de Capçanes que esta fabulosa y luego mas tarde compramos una botellitas en el Aguilo Vinateria. Lo mejor el precio 35 € el menú mas algun extra salio por unos 42 €, muy recomendable.
Solo una critica constructiva tiene de cambiar el cartel por que esta que se cae a trozos y apenas se ve.Un saludo chicos

Debido a mi actividad laboral, soy cliente habitual de Matias desde hace más de un año. En todo este tiempo no he podido encontrar ningún fallo. Excelente relación calidad-precio, platos muy elaborados, carta de vinos adecuada, servicio amable y sincero (en todo momento te comunican retrasos, novedades...). Si os atrevés pedidle que salga y os explique la elaboración de sus platos (yo he preparo alguno de los prostes y...). Dejáos guiar por sus empleados. Id solos o en pareja.