Listas de espera en los grandes restaurantes

Cien por cien de acuerdo. Básicamente cada uno se gasta su dinero, primero en lo que puede y, dentro de lo que puede (entender por poder capacidad adquisitiva), en lo que le gusta (descontando gastos fijos).

También como dices hay que tener en cuenta el grado de esfuerzo y sacrificio (osea, sacrificio de otras compras o incluso pedir prestado y pagar intereses) que puede suponer una compra. Un ejemplo, ¿ qué son 500 euros en una cena para Valdano, Mourinho, Guardiola ? Probablemente ni paguen, vayan encima invitados pero, para ellos 500 euros en una cena es menos que para mí pagar 10 euros por un menú del día. Si quisieran podrían salir diariamente a comer al Celler de Can Roca y sus economías no se verían muy mermadas pues al año, a 500 euros diarios, saldrían a 182.500 euros, es decir, otra "miseria" comparado con los ingresos de estas personas que, en ningún caso son inferiores a 2-3 millones de euros anuales.

En fin, no entraba tanto en el tema económico puro y duro, sino en el tema "tiempo" y "disponibilidad" (que en muchas profesiones también son dinero). En mi caso, evidentemente no puedo estar todas las semanas dejándome 150-300 euros en una comida/cena pero una vez al año, previendo el tema, afortunadamente sí (aunque con el viaje pueda costar la historia 600-800 euros no deja de ser el precio de un puente de escapada viajando a alguna zona de España).

También hay que ponerse en situación y darse cuenta que, por desgracia, hay personas actualmente que, ni siquiera con previsión de ahorro, podrían permitirse eso (conozco gente que, por desgracia, con la crisis, jamás sale de viaje por barato que sea porque tienen los euros contados y no llegan a fin de mes ni estando en casa el mes entero). Esas personas no pensarán en el Celler ni en Can Fabes. Una cena en un restaurante medio desconocido o un aperitivo en un bar ya sería una fiesta en esos casos.

PD. La vida si no fuera por pequeñas alegrías (las de cada uno, baratas o caras) no tendría sentido ;)