¿Cómo reconocer un buen menú del día?

16 respuestas
    #16
    Juanjosantos
    en respuesta a Lauzepp

    Re: ¿Cómo reconocer un buen menú del día?

    Ver mensaje de Lauzepp

    Más o menos sigo la línea de lo comentado por aquí... si no conozco ni tengo referencias me fijo:

    - Máximo menús de 4 primeros y máximo 4 segundos (más es "paja" y menos da sensación de que preparan menú casi por obligación).

    - No olor a fritangas (ni desagües).

    - Puede ser un lugar humilde, con manteles de papel en mesa, pero verse limpio (la suciedad y yo no somos amigos).

    Centrándome en el primer elemento, normalmente la primera y segunda opción de primero suele ser plato/s de cuchara del día, es decir, la opción más recomendable. Todo lo demás: entremeses, ensaladillas, pinchos de tortilla, ensaladas y similares, son "platos de relleno" para gente que no gusta de los platos de cuchara (ó estan a dieta para el caso de las ensaladas).

    Saludos

    En la victoria mereces beber champagne; ¡en la derrota lo necesitas! (Napoleón Bonaparte. 1769-1821)

    #17
    Juanjosantos

    Re: ¿Cómo reconocer un buen menú del día?

    Iba a señalar que si conozco y tengo referencias, ya todo lo que comentemos aquí no cuenta tanto porque sólo uno, con buen criterio, sabe si la calidad de la comida, cantidad, entorno, servicio y circunstancias de un local determinado, unido evidentemente al precio del menú, le compensan o no.

    Tenemos que tener en cuenta que hablamos de "comer de diario" y yo entiendo por ello comer razonablemente bien (sobre todo comida de cuchara si es posible), con un objetivo más nutricional que hedonista, en un tiempo relativamente limitado (no hablamos de comidas de café, copa y puro, es decir, dedicar a la comida, en mesa un máximo de 40-60 minutos) y a un precio contenido, es decir, un precio que para la economía de un "currante" razonablemente bien pagado, le compense (ó no le resulte muy gravoso)... pues si se va a dejar la mitad de su sueldo diario en comer fuera, no creo que le resulte muy interesante el asunto. 

    Además, doy por hecha la circunstancia de que todo esto es pagándose uno lo que se come de su bolsillo, es decir, sin dietas de comida por parte de la empresa (yo, por ejemplo, trabajo en una Universidad pública y eso de las dietas de comida casi no existe ya en mi entorno salvo en casos muy concretos, excepcionales, debidamente justificados y con un importe también limitado por persona: con los recortes, hace tiempo que se acabaron ya las comidas suntuarias de diario, café-copa-puro, pagadas por el erario público).

    Saludos

     

    En la victoria mereces beber champagne; ¡en la derrota lo necesitas! (Napoleón Bonaparte. 1769-1821)

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