Cepas a las que exigimos... ¿demasiado?

Tengo la impresión de que, en general, estamos tan bombardeados de vinos de cabernet sauvignon, merlot, garnacha, chardonnay, sauvignon; y quizá en menor medida de syrah, tempranillo, etc etc que uno pues podría tener cierta indulgencia a vinos de estas cepas.

Es decir, que a veces (insisto: a veces) no les pedimos demasiado, o mejor dicho, al ser cepas que se adaptan más o menos bien a una diversidad de suelos en todo el mundo, los vinos suelen ser aceptables, incluso buenos a lo largo de buena parte del espectro de precios. Vamos, que hay tantísimo merlot en el mundo, tantísimo sauvignon blanc, que los modelos o referencias se desdibujan o tienden a desaparecer. ¿O le pedimos mucho a un syrah sudafricano para que se parezca a un ródano, a un chardonnay argentino para que se parezca a un chablis?

Pero me pregunto qué pasa cuando probamos vinos de cepas que no se adaptan tan bien a una diversidad de suelos y climas. Mis dos lectores aquí saben de mi fascinación casi fetichista por el nebbiolo. ¿Donde más produce vinos de gran calidad, que no sea el Piamonte? Y en los últimos meses he estado probando pinot noir de distintas regiones. (Sí, ya sé que ando desaparecido de ’vinos catados’, pero que le vamos a hacer). He probado de EEUU (Oregon y diferentes climats de Sonona, en California), Argentina, Nueva Zelanda, Austria, Alemania, Chile.

Y me acuso: les pido a veces demasiado, con el modelo borgoñón en mente. Y los poquísimos nebbiolos no italianos que he visto y probado, con el modelo piamontés. Más allá del debate tan llevado y traído de las dificultades que entrañan estas cepas, y más allá de mis propias contradicciones, el punto es que los ’modelos’, ’estilos’ o ’referencias’ son perniciosos y no permiten apreciar los vinos con base en sus propios méritos. El riesling es otro caso. Casi todos buscamos, conscientemente o no, el perfil de un riesgling del Rin o del Mosela, con sus notas de petróleo y carácter ’metálico’.

Estoy convencido (¿y quién no?) que es bueno pedir calidad, y que la calidad necesita referentes. Cuándo se trascienden esos referentes, no me quedan tan claro. Supongo que se logra cuando el vinatero, la viña y el vino, tras años de prueva y error, encuentran un estilo.

DPW