Cuestion de seguridad en el vino

Por más confianza que tenga uno en un productor, miles de cosas pueden ocurrirle a una botella de vino desde que sale de la bodega hasta que llega a las manos del consumidor. Un vino de un productor al que respetas casi incondicionalmente (digo ";casi"; porque siendo el mundo del vino lo que es, hay siempre una necia oportunidad de que el productor en cuestión decida irse contra natura y desilusione a sus ";fans";). Incluso pueden ocurrir cosas en la bodega misma, o hasta ne le viñedo, que vayan y chafen el vino irremediablemente, precluyendo así la posibilidad de que tengamos alguna ";seguridad"; sobre lo que hay en la botella.

Claro, hay productores de vino y hay productores de vino... Algunos se han ganado mi confianza a través de décadas y apostaría por ellos sin tener que pensármelo demasiado, que creo que es a lo que va tu pregunta. Si compras un vino de ellos, puedes sentirte suficientemente confiado (aunque nunca 100% seguro, pues tal seguridad es imposible por lo que digo arriba) de que pusiste tu dinero en un producto de calidad.

En Francia, productores así para mí lo son Mugnier, Drouhin, Roumier, Rousseau, Jayer, Coche-Dury, Bernard Morey, Louis Michel, el Marquis d’Angerville, Hubert de Montille, Chandon des Briailles, Bertagna Jean-Paul Brun, Coudert, Marcel Lapierre y muchos otros de Borgoña que no voy a ponerme a cantar aquí por razones de espacio, que los 5,000 caracteres de la porra se van en nada. En el Loira siempre compro con confianza a Huet, Foreau, Pinon, Angéli, Ollivier, Luneau-Papin, Clos Roche Blanche, Breton, Olga Raffault, Deletang, Chidaine, Bellivière, Pascal Cotat, François Cotat, Thomas-Labaille,Foucault-Frères y otros (claro, la regla se tergiversa en el 2003, cuando fue mejor no coprar vino de nadie en casi ninguna parte de Europa). En el Ródano puedo comprar a Chave, Faurie, Juge, Allemand, Voge, Verset (bueno, ya se ha jubilado, o sea que hay que mirar al pasado). Más al sur ya la cosa se convierte un poco en lotería. Y del Burdeos actual ni hablaré. A eso le perdí toda la confianza yo hace muuuuuuuucho.

En Piamonte compro a Brovia, a Oddero y a un par más sin pensármelo dos veces. En Toscana ya casi no compro a nadie. En el Friuli he descubierto un par de productores que llevan como cinco añadas encantándome, pero que aún no se ganan que ponga yo la mano en el fuego por ellos. Eso toma muchos años de vino excelente.

En Austria compro sin contemplaciones a mi adorado Nikolaihof, a FX Pichler, a Prager, Brundlmayer, Knoll y Jamek.

En España se sabe muy bien a quienes les soy fiel, al menos en Rioja. De los gallegos se me ve comprar en cantidades a Do Ferreiro y a Palacio de Fefiñanes. Aparte de ellos, creo que cada día voy a comprar más alvarinho que albariño, pues del lado del Minho que no queda en Galicia se hacen vinos mucho más interesantes. En Navarra le tengo plena confianza a Chivite. En el Duero se la tengo a Valduero y a Vega Sicilia. En Andalucía me merecen igual sentimiento varias casas.

Pero... ¿qué diablos hago? Esta es una lista demasiado larga. Y al final solamente estoy meditando hacia mis adentros sobre pura preferencia personal. Mejor dejo esto...

M.