Pues ya lo sabes Esther: 1. Espumosos. Me encantaría decir que más champagne

Pues ya lo sabes Esther:

1. Espumosos. Me encantaría decir que más champagne que cava, pero mi bolsillo no me lo permite. Lo que más consumimos en verano son cavas bien fríos. Además ¿con qué no maridan los espumosos?
2. Blancos, sobre todo Riesling. Los compramos desde los más básicos hasta algún que otro capricho. Más bien secos, pero tampoco les hacemos ascos a los más dulces. También le damos a los verdejos, asequibles y siempre frescos para estos calores. Y luego ya le pegamos a todo lo blanco que pasa por nuestras manos.
3. Manzanillas, finos y generosos. Aquí mi chica no me acompaña, que tampoco es una mala noticia ;-) Como aguantan bien en nevera me puedo permitir el abrir botella sin pensármelo demasiado. Además en esta época me suelen apetecer palos cortados, amontillados u olorosos después de cenar.

Y poco más... la verdad es que tintos solo para las catas, en casa se me hace muy cuesta arriba con estos calores. Ni más fríos, ni maceraciónes carbónicas ni nada... Muy cuesta arriba.

Saludos
Dani